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—Ahh~, Jin, para —Hoseok arqueó más la espalda al sentir la profundidad de los dedos de su tío preparándolo.

—Quién diría que realmente puedo rozar tu punto dulce con mis dedos —SeokJin siguió su trabajo de penetrarlo con los dedos, abriendo más su entrada —. Creo que ya es suficiente.

Los dedos de del mayor salieron, el sonido pegajoso del lubricante y los dígitos saliendo es lo único que se escuchaba, más los jadeos de Hoseok. SeokJin le sonrió para ponerse detrás de él y acariciar su espalda baja, abriendo y cerrando sus nalgas, dilatándose con esa bella vista.

—Jin... —jadeo necesitado Hoseok alzando más su trasero —. Lo quiero, lo quiero —Hoseok dejó de lamer el dildo soltando un "pop".

El mayor lo tomó entre sus manos, tenía la medida exacta del pene más grande de la familia, -que ese es Jungkook-. El dildo tenía un hermoso color rosado con venas marcadas e incluso infantil al tener algunas calcomanías de arcoíris con unicornios, también brillantina.

— ¿Quieres tenerlo ya Seokie? Porque tu bello agujero lo está pidiendo —SeokJin pasó sus dedos por el ano rosado de Hoseok —. Si vieras lo ansioso que está —susurró al ver como se abría y cerraba.

—Jin~ —pidió en un llanto Hoseok moviendo más su trasero.

El mayor decidió dejar de hacerlo sufrir, así que tomó el juguete con una mano para llenarlo de lubricante. Lo esparció por toda la longitud con paciencia mientras le daba unas pequeñas nalgadas al menor, dejándolas rojas.

— ¿Quién te ha hecho esto bebé? —preguntó el mayor al ver unas marcas rojizas en su piel —. Realmente son unas bestias.

Hoseok no tuvo tiempo de contestar ya que SeokJin posicionó la punta del juguete en la entrada del menor, comenzó a jugar con él paseando el dildo por toda la extensión de su trasero.

—Jin... Ahh por favor —Hoseok le miró sobre los hombros desesperado mientras su miembro gotea ansioso.

—Está bien —concedió el rubio metiendo poco a poco el dildo en su agujero con una sonrisa —. Es hermoso ver cómo puede llenarse tu sucio agujero con este juguete —apretó el botón para que comenzara a vibrar.

Hoseok dejó caer su cuerpo sobre la cama al sentir el dolor y el placer mezclados. Las vibraciones lo dejaban sin aliento, moviéndose sin control en la cama gimiendo como gata en celo.

—J-Jin —gimió el menor con ojos llorosos.

La mano de SeokJin se movía experta, sacando y metiendo, dando círculos y dando fuertes nalgadas al hermoso trasero del menor, pues se había dado cuenta de cuanto le encantaba que lo azoten. Hoseok siendo un manojo de nervios, dejó que él se acostumbre su trasero a ese dolor, unos cuantos minutos después comenzó a moverse ya más necesitado pidiendo cada vez más.

SeokJin le miraba con fascinación mientras movía más rápido el juguete, Hoseok se arqueó, una sonrisa juguetona adornó el rostro serio de SeokJin. Sacó el juguete y lo volvió a meter más profundo, tocando la próstata del menor.

—Ahh~ ahí, ahí~ ahh~—Hoseok tomó con sus dedos las sábanas color lavanda gimiendo más fuerte con cada estocada.

SeokJin lo seguía penetrando, mientras su mano libre comenzó a acariciar los hoyuelos de venus con una sonrisa jadeante sintiendo como su pene goteaba. Como pudo se quitó la hebilla del pantalón para desabrochar el cierre bajando velozmente su ropa junto con el bóxer. Su pene se alzó con la punta roja y goteando el presemen.

—Ahhh J-Jin —Hoseok apretó su trasero marcando dos agujeros a los costados —. M-me voy a venir —avisó con los ojos llorosos del placer.

—Lo harás conmigo —ordenó SeokJin tomando su propio miembro mientras comienza a bombearlo para seguir penetrando a Hoseok con el juguete —. Ni se te ocurra venirte antes —el mayor besó sus hoyuelos de venus para pasar su lengua desde la espalda baja hasta su nuca.

—S-Sí —asintió Hoseok intentando controlarse.

SeokJin lo volteó para abrir las piernas de Hoseok y posicionarse entre ellas, dejando al juguete seguir con las vibraciones a un nivel intermedio.

—Has algo para que me corra —siseo jadeante Jin mientras seguía moviendo su mano sobre su pene.

Hoseok asintió llorando por el placer para alzar su mano y atraer al mayor, comenzando con un beso caliente, lleno de mordidas lengua y toques morbosos. El pelinegro comenzó a pellizcar su cuello encontrando una zona erógena en ese lugar, comenzó a gemir en su boca necesitado mientras rozaba su pene con la mano de SeokJin casi tocando el propio del mayor.

—Tan caliente —SeokJin susurró mordiendo sus labios —. Tan hermoso —Hoseok gimió al sentir la gran mano en su pene juntándolo con el de él —. Escógeme a mí —soltó un gruñido bastante sexy para los oídos de Hoseok.

Ambos gritaron del placer cuando el semen caliente golpeó con sus estómagos y la mano de su tío. Aún con sus labios juntos y respirando agitadamente SeokJin se las arregló para sacar el juguete del interior de Hoseok, un gemido de placer inundó los oídos de SeokJin quien sonrió triunfante.

Dejó que Hoseok se recostara en la cama para levantarse y tomar otra caja, se la dio al menor con una sonrisa. Hoseok la abrió sorprendido, como SeokJin había dicho y prometido, le había traído algo para tener en su agujero y no era nada más que unas bolas chinas, ¿cómo las conocía? Leer tanto Yaoi podía darle mucho conocimiento a veces.

— ¿Tío Jin? —preguntó sorprendido al ver como el mayor abre sus piernas para pasar una toalla húmeda en su agujero, limpiando de adentro y afuera.

Las piernas de Hoseok temblaron al sentir la prenda entrar y salir por su agujero mandándole escalofríos placenteros.

—Dame tu regalo hermoso, tendrás la mejor experiencia de tu vida —SeokJin pasó su lengua por sus labios ansioso.

Hoseok con las manos temblando le pasó el juguete, el mayor tomó las bolas chinas, por suerte solo eran cuatro, cada una más grande que la otra.

— ¿Va a doler? —preguntó Hoseok pues el dildo si había dolido, no quería imaginar unas bolas.

—Lo vas a disfrutar hermoso, tu agujero aún sigue dilatado —le respondió dándole una sonrisa, otorgándole confianza.

Que equivocado estuvo al principio.

Cuando la primera bola entró Hoseok quería que saliera, pues las bolas eran muy grandes. Después del lloriqueo con la segunda, la tercera se sintió como un dolor en el estómago, quizá así se sentían las mujeres con los llamados "cólicos".

SeokJin le dejó descansar al verlo transpirar de esa forma. La mano libre de su tío tomó el miembro de Hoseok para comenzar a masturbarlo, para Hoseok eso no era suficiente así que lo tomó de sus anchos hombros para besarlo mientras la cuarta bola entraba.

Ambos soltaron un gemido, Hoseok rasguñó la extensa espalda del mayor mientras SeokJin dejaba el hilo de las bolas fuera. Ambos se separaron, el mayor repartió varios besos en el rostro del menor para dejar que durmiera un rato pues ya era bastante tarde y estaba seguro que mañana no se querrá levantar.

— ¿Te dolió hermoso? —preguntó con fingida inocencia, mientras sonreía al ver a su Hoseok acostado en su pecho.

—Ya no —susurró cansado mientras cerraba cada vez más sus ojos.

—Me alegra porque lo tendrás todo el día, ni se te ocurra quitártelo —amenazó con voz seria SeokJin, sin embargo, al ver que Hoseok ya se había dormido solo atinó a besar sus labios una última vez —. Descansa hermoso, mañana será un gran día.

Hoseok ya sabe a quién escoger. 

Forbidden // Hoseok x BTS //Donde viven las historias. Descúbrelo ahora