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Los últimos días de clases siempre eran los peores, pero el último día siempre superaba la mierda de los demás días.

Todos sus compañeros lloraban por terminar su preparatoria, menos Minho y Hyunjin, no les importaba no volver a ver a sus compañeros, después de todo solo ellos dos se importaban y seguirían juntos un rato más largo.

La parte que Hyunjin más odiaba era la firma de anuarios, se hacía al terminar cada ciclo escolar, todos querían firmar el libro de todos, sin embargo el anuario de Hyunjin nunca tenía firmas, solo una vez alguien dibujó una carita feliz en séptimo grado, pero después de eso nadie nunca se molestaba siquiera en preguntar por firmarlo, así que Hyunjin ya estaba acostumbrado a ni siquiera sacarlo, por lo que lo guardaba en su mochila y no lo sacaba.

Hyunjin veía como en el asiento de Minho había una gran fila para firmar su anuario, hasta chicos de otro salones se encontraban ahí, pero le reconfortaba saber que ellos solo tendrían una firma en su anuario, sin embargo Hyunjin tenía una firma en su corazón, no era competencia ninguna de esas personas, se lo reafirmaba el que mientras todos firmaban el anuario del mayor este solo miraba a Hyunjin mientras sonreía.

'Minho me ama'Dijo en su mente y no pudo evitar sonreír también.

El día transcurrió bastante rápido, los profesores solo se despedían y ya que la mayoría de padres se pusieron de acuerdo decidieron no tener ceremonia de graduación lo cual Hyunjin agradecía, así que solo les dieron sus papeles ese día y más tarde se pondrían unas togas para sacar su foto de generación.

Cuando llegó el momento todos corrieron a cambiarse en los vestidores pero Hyunjin no quería ir con todos ellos así que decidió ir al aula de arte, también aprovecharía para dar un último adiós a esas cuatro paredes que lo habían refugiado de su vida escolar.

Al terminar de ponerse su toga recorrió con la mirada todos los materiales que había en el salón, los bancos y caballetes lo cuales habían sostenido varias de sus pinturas, iba a extrañar ese cuarto, lo sabía muy bien, aunque estaba agradecido también de no tener que regresar a la escuela.

Unos pequeños golpes se hicieron presentes en la puerta.

-Soy Minho.-Susurró del otro lado de la puerta.

-Pasa.

Minho ya venía un su toga azul marino, Hyunjin no podía dejar de pensar en lo lindo que se veía.

-Ya todos terminaron de cambiarse y están pasando al campo de fútbol para tomar la foto.

-Una última foto y nos vamos.

-Es un poco extraño.

-Creí que nunca se acabaría la preparatoria, pero aquí estamos.

Minho asintió.

Hyunjin caminó hacia el mayor y lo envolvió en un abrazo.

-Me alegra saber que no me tengo que despedir de ti.

El castaño correspondió al abrazo posando su cabeza en el hombro del contrario.

-Nunca podría despedirme de ti Hyunjinie.

Ambos agregaron más fuerza a su agarre, anhelaban poder quedarse más tiempo abrazándose, pero en ese momento era imposible. Después de un último vistazo al salón, Hyunjin salió junto con Minho, dejando su refugio atrás.

Ambos se dirigían al campo tomados de la mano, sin embargo Minho guió a Hyunjin hacia otro lado.

-Acompáñame.-Dijo.

Sus manos seguían unidas, cada vuelta que daban por los pasillos hacía que Hyunjin se diera cuenta hacia donde se dirigían, conocía de memoria ese recorrido. 

Empty Souls-HyunhoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora