Capítulo 10

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Las luces de la ciudad iluminaban tenuemente el apartamento de Ethan Thornwood, creando sombras que danzaban sobre las paredes con cada movimiento. Ethan y Aiden Valenwood habían pasado una noche maravillosa en uno de los restaurantes más exclusivos de la ciudad. La conexión entre ellos era palpable, una energía eléctrica que había estado creciendo desde su primer encuentro. La tensión que una vez había marcado su relación se había transformado en una atracción innegable, y ambos sabían que esta noche culminaría en algo más.

Al llegar al apartamento, Ethan cerró la puerta detrás de ellos y se volvió hacia Aiden. Sus ojos se encontraron, y en ese momento, todo lo demás desapareció. Ethan dio un paso adelante, su mano rozando suavemente la mejilla de Aiden antes de inclinarse para besarlo. El beso fue suave al principio, pero rápidamente se intensificó, reflejando la pasión que ambos sentían.

-No puedo creer cuánto hemos cambiado desde el primer día que nos vimos.

-Lo sé. Es... sorprendente, pero también increíble.

Ethan tomó a Aiden de la mano y lo guió hacia el salón, donde las luces tenues y la música suave creaban un ambiente íntimo. Aiden, siempre tan controlado, dejó que sus emociones tomaran el control por una vez, respondiendo al toque de Ethan con igual intensidad.

-¿Quieres un trago?

-No, gracias. Creo que tenemos algo más interesante que hacer.

Ethan sonrió, su vanidad brillando por un momento mientras observaba a Aiden con admiración. Sabía que esta noche sería especial, y quería asegurarse de que ambos la recordaran.

-Vamos al dormitorio.

La habitación de Ethan era un reflejo de su personalidad: lujosa y cuidadosamente diseñada para impresionar. La gran cama de sábanas de seda estaba en el centro, invitante y perfecta para lo que estaba por venir. Ethan llevó a Aiden hacia la cama, sus manos explorando el cuerpo del otro con una urgencia que había estado conteniendo durante semanas.

-Nunca pensé que estarías aquí, conmigo, de esta manera.

-Y aquí estamos. Supongo que a veces las cosas inesperadas son las mejores.

Ethan comenzó a desabotonar la camisa de Aiden, sus dedos hábiles trabajando con rapidez mientras sus labios seguían explorando el cuello de Aiden. Aiden respondió quitando la camisa de Ethan, sus manos recorriendo el torso musculoso que había visto tantas veces en el set y en el gimnasio, pero nunca había tenido la oportunidad de tocar de esta manera.

La ropa pronto quedó olvidada en el suelo, y ambos hombres se encontraron desnudos, sus cuerpos perfectamente esculpidos iluminados por la suave luz de la habitación. Se observaron por un momento, admirando la belleza del otro antes de volver a besarse, esta vez con una pasión que amenazaba con consumirlos.

Ethan empujó suavemente a Aiden hacia la cama, su cuerpo cubriendo el de él mientras continuaban besándose. Cada toque, cada caricia, estaba cargada de deseo y anhelo. Aiden dejó escapar un gemido cuando los labios de Ethan se movieron por su pecho, explorando cada centímetro de su piel.

-Eres increíblemente hermoso.

-Y tú... eres perfecto.

Ethan sonrió ante el cumplido, su ego recibiendo un impulso, pero esta noche no era solo sobre él. Quería asegurarse de que Aiden disfrutara cada momento tanto como él. Sus manos se movieron hacia abajo, encontrando el miembro erecto de Aiden y comenzando a acariciarlo con una habilidad que venía de años de experiencia.

-Ethan...

El nombre salió de los labios de Aiden en un susurro de placer, su cuerpo arqueándose bajo el toque experto de Ethan. Pero Ethan no estaba listo para terminar aún. Se movió, sus labios y su lengua explorando el cuerpo de Aiden con una devoción casi reverente.

¿Sexo o Amor? | +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora