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Alia fue criada para ser mejor.
Mejor persona, mejor estudiante, mejor mentalidad, mejor todo.
Aladdín quería todo para sus hijos, la mejor educación, las mejores cosas. Era un padre amoroso, siempre lo fue y siempre se aseguró de que sus dos hijos fueran buenas personas. Conscientes de sus privilegios y de que no todos los tenían.
La historia de Aladdín, era una muestra para Alia de las clases sociales. Su padre siempre se esforzó en ayudar a los que no tenían nada, como él hace mucho.
Azis y Alia eran inteligentes, eran muy apuestos y tenían títulos, pero lo que más llenaba de orgullo a su padre era el gran corazón de sus dos hijos. Desde su primogénito, hasta su princesa, ambos siempre nobles, moralmente mejores. Ambos hermanos estaban de acuerdo con que nacer en la familia que nacieron, siendo hijos de quienes eran sus padres, era una suerte que no muchos tenían.
Por eso a ella le destruía pensar que probablemente estuviera decepcionado de ella. Mirando a Jay y todo lo que podía ver era a Jafar apoderándose de Arabia, del genio, de su abuelo, de su madre. Jay no era Jafar, Dios sabía que ella lo entendía, sin embargo, la ironía era cruel.
Sencillamente se sentía confundida. Ya no se sentía mejor, ya no se sentía superior al resto de Auradon. Todo lo que le habían enseñado toda su vida, se estaba poniendo aprueba en ese momento.
Se sentó en césped, viendo a lo lejos a Juliette y Carlos desaparecer por el jardín hacia la mesa del té de los chicos del País de las Maravillas. Preguntándose qué tan horribles eran las circunstancias en las que vivían en la Isla, escuchó historias horribles de ese agujero olvidado por Adam.
────. ¿Estás bien, Alia? ──── Blanca la miró desde arriba, iba pasando cuando vio a la morena con la mirada perdida.
────. Sí, gracias, Blanca ──── le sonrió un poco, suspirando.
────. ¿Es por los chicos de la Isla?
────. ¿Cómo lo sabes?
────. Porque la hija de la Reina Malvada me pone nerviosa ──── respondió, sentándose junto a ella ────. Su madre hizo hasta lo imposible por matar a la mía.
────. Lo sé, es tan extraño. Y quieres ser mejor, se supone que debes ser mejor y dejar el pasado atrás, pero me está costando tanto ──── la pelinegra asintió de acuerdo ────. No lo odio, solo necesito un minuto para procesarlo.
────. Sus padres les hicieron daño a nuestros padres ──── Blanca le tomó la mano, sonriente ────. Está bien sentir conflicto por eso, no es algo que se olvide fácil.
────. Pero al final la diferencia es que no vamos a ser groseras con ellos, ¿no? ──── se miraron antes de asentir lentamente ────. A veces odio ser moralmente superior.
