El Boxeador y la Idol

VII

•Oshi no ko y The Boxer no me pertenecen, créditos a sus respectivos creadores

•Nota: No había actualizado por falta de tiempo, y pues también andaba pensado en como escribir los combates para no hacerlos tan repetitivos. Porque como sabemos, Yu es Yu.

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Hoshino Ai había cambiado. Era algo que todos podían notar. 

Ella era la estrella principal de B-Komachi, el as de Producciones Strawberry, por esa razón ella brillaba. Pero ahora, tenía un brillo incandescente que no se podía comparar a su anterior "yo". 

Después de por fin liberar aquellas palabras que tanto anhelaba decir a sus pequeños hijos, sintió una oleada de alivio y alegría. 

Pero ella no estaba conforme solamente con eso, quería más. Ella sabía que no cumplía perfectamente su rol de madre debido a su carrera, y por ilógico que suene, sus pequeños Aqua y Ruby parecían entenderlo a pesar de tener un poco más de un año de edad, aún así, ella quería pasar tiempo con sus hijos. 

Pero sería un completo desastre si se saliera a la luz que la estrella de B-Komachi tuviera dos pequeños hijos y fuera madre soltera. La industria del entretenimiento a menudo tenía expectativas estrictas para las idols, y si la verdad saliera a la luz, no solo su carrera se vería afectada, sino la de su representante y manager. Por esa misma razón no podía salir y disfrutar con hijos.

Claro, eso únicamente pasaría si fuera Ai de B-Komachi y no alguien más. Ella es ambiciosa y una experta mentirosa.

–Fufufu con esto nadie me reconocerá

Ai se miró en el espejo, admirando su grandioso e ingenioso disfraz, debía admitirlo, estaba sorprendida de sí misma. Sin duda sus pequeños Aqua y Ruby eran unos genios porque ella también era una genio.

Tenía una peluca dorada, lentes de contacto de color rubí, se hizo un pequeño lunar en su mejilla derecha con maquillaje y vestía ropa holgada. Con esto, nadie la reconocería como Ai de B-Komachi.

–Aqua, Ruby, ¡Hoy vamos a salir! 

……....

–Paseo~ paseo~ paseo~♪– La pequeña Hoshino Ruby cantaba muy animada. Ella estaba muy feliz, no, de hecho, ¡Ella estaba extremadamente feliz! ¡Sentía que había alcanzado más allá de Nirvana! A su lado, su hermano gemelo, Aquamarine, observaba con ojos curiosos el mundo que los rodeaba.

El día era perfecto para un paseo. El cielo estaba despejado y el sol brillaba suavemente, acariciando sus mejillas con su calor. Ruby, con su energía desbordante, agitaba sus manitas y pateaba sus piecitos, entusiasmada por cada pequeño detalle a su alrededor: los árboles altos, los pájaros cantando y los perros que paseaban con sus dueños.

Continuaron su paseo por el parque, donde el aire fresco estaba lleno del aroma de las flores y el sonido de las risas de otros niños. Ruby seguía cantando su canción de paseo, su alegría era contagiosa y varias personas que pasaban no podían evitar sonreír al escucharla. 

Ai encontró un banco a la sombra de un gran roble y decidió hacer una pausa. Sacó algunos bocadillos del bolso y dejó que los niños explorarán el área cercana. Ruby, con su inagotable energía, camino hacia un grupo de flores, mientras Aquamarine se sentó tranquilamente, observando una fila de hormigas que marchaban diligentemente por el suelo.