TRONO DE HIERRO Y SANGRE || +18

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Yo en la madrugada queriendo de sueño ❤️

Al aterrizar encuentro a mi madre mirándome mal y a medio mundo un poco molesto, más no sé porque. Dejó los cachorros en el suelo para caminar al interior del castillo con ellos siguiendo mis pasos. Trekan, Elis, Khassian y Riack tienen caras de pocos amigos que me tienen sin cuidado.

—¿Qué demonios pensabas al irte con Acrias?—miro mal a Khassian que fue el primero en hablar—. Ese bastardo le dijo a una paloma que le dijera a todos los Grandes Señores que tengo a mi ramera sentada en el trono, y que Sander debe estar de Luna de miel con una mujer que valga la pena.

—¿No vio al puto dragón que me obedece?

Acrias ruge afuera del castillo.

—Eso lo mando a la mierda y todos los Señores exigen ver a Sander para que dejé mis juegos—aprieto las manos—. Los tendrás aquí por la mañana y más te vale que ahora sí hagas tu trabajo de reina o…

—¿Escuchaste a ese idiota?—gruño en tono bajo—. ¿Lo escucharon?—los veo igual o más molestos—. No soy su reina, no soy reina de nada, soy sólo otra de tus rameras—Khassian sólo arquea una ceja—. Una más en la cama del Príncipe Idiota, no la pareja del rey.

<<Estoy cansada y harta de que todo el mundo espere cosas de mí cuando me daba la espalda, y creo que extraño estar metida en mi manada siendo la joven invisible a la que nadie quería cerca.

—Bryce…

—Haz tú qué esos bastardos se larguen del castillo que no quiero que me molesten por esto.

Le arrojó a los pies la capa que use en la mañana y me voy a mi habitación, no quiero más de esta mierda.

Era más feliz cuando no tenía un reino que gobernar, una pareja a la que dejé en cama al aceptar nuestro vínculo, un dragón a mi mando y… era más fácil cuando era invisible.

Cambio de dirección y voy a la recámara de Sander donde Mergan me deja entrar diciendo que no fue mi culpa lo que sucedió en la sala. Agradezco que al menos sea el único que me trate bien por lo sucedido.

Sander descansa plácidamente y sólo busco algo de consuelo en su espacio, me acerco a él antes de darle un beso en su frente, y luego tomar su mano con ese cariño que tantas veces me ha servido de estímulo.

—Te necesito, Sander—digo sin que pueda detener mis palabras—. Tus Altos Señores no me quieren porque no huelo a ti. Por favor cariño, te necesito. Sé qué no es tu tiempo… te quiero, pero de verdad te necesito.

Dejó un beso en sus labios antes de negar y salir de la habitación.

Voy a mi recámara donde Ginna me ayuda a quitarme la ropa para darme un baño y después irme a la cama con Ginna diciendo que alguien de servicio me traerá a los pequeños zorros de nueve colas que encontré en esa isla, sonrío despacio pensando en Sander y en qué me dirá algo por los zorros.

Entre mis lágrimas y miedos me quedo dormida.

🍁

Abro los ojos al escuchar la puerta, Ginna que entra corriendo para meterse a mi armario y sacar un vestido negro con detalles rojos que me servirán para este frío infernal. Pone el conjunto en mi cama y luego me ayuda a levantarme.

Me viste lo mejor que puede y también trenza mi cabello que ata con un listón verde, me sonríe antes de dejarme ir. Khassian no dice nada cuando me escolta escaleras abajo ni cuando Trekan y Riack ven con sequedad las puertas que dejan abiertas para que todos los señores entren. Paso saliva viendo a todos ellos entrar.