Existen unas coordenadas en el planeta que están llenas de misterio y sombríos mitos.El Triángulo de las Bermudas, es una región en el Océano Atlántico, que ha sido objeto de controversia y mitos debido a la desaparición de barcos y aviones en sus aguas.
Algunos científicos afirman que es debido a su ubicación geográfica que provoca un clima demaciado inestable y peligroso, otros más que es uno de los lugares con mas magnetismo en el mundo y que por eso los radares pierden su orientación haciendo que las embarcaciones y aeronaves nunca puedan salir de sus coordenadas.
Otros mitos dicen que ahí se encuentra el fin del mundo, el abismo de la tierra o fuerzas sobre humana.
Al parecer es un misterio resuelto con muchos secretos...Como la mente humana, nunca estás seguro de que pasa, lo unico que sabes es que algo está pasando.
***Al terminar el día hemos decidido volver a casa y mientras Kall circula por las avenidas me pregunto si debo insistir en acompañar a Christian el día de mañana. Muy en mi interior se que él no desea estar solo pero tampoco puedo obligarlo a que lo acepte. Y forzarlo creo que sería desconsiderado de mi parte ya que se mejor que nadie lo que se siente querer hacer algo pero no tener el valor de reconocerlo.
Al bajar de la camioneta en el estacionamiento de mi edificio estoy un poco nerviosa.
—Sale— se limita a decir Kall como despedida para Christian mientras sube los escalones hacia los elevadores
Se que a notado la tensión que hay entre nosotros de alguna forma ya que no paro de mirarme por el retrovisor cada dos que tres.
—¿Te veo en un momento?— me dice Christian colocándose su gorra
—¿Quieres venir a la casa?—Pregunto con tono bajo
—Preferiria en mi departamento—Dice él evitando mi mirada
—Okey— Digo antes pasar a su costado y él me detiene tomando mi mano y besa mi sien
—Te espero Kai
***—No lo sé chicas estoy un poco confundida con todo— escribo al grupo de latinas que saben cada paso que doy respecto a esta clase de relación
—Pues es normal Kai, no te desesperes son muchas cosas encima, la visita a tus padres, el problema de Christian, lo de Nueva York—escribe Sofia
—Lo de Nueva York está descartado
—¿Ya le dijiste que no irás?—Pregunta de inmediato Gabriela
—No pero ya lo he decidido, solo tengo que decirle— digo viendo el techo de mi habitación que está igual que mente en este momento, en blanco sin nada escrito.
—Kai yo creo que Christian tiene una sorpresa para tí por eso su insistencia
—¿De que hablas?
—Creo que te va a pedir que seas su novia—Dice Sofía sin más
—Estan locas—Respondo
—ja,ja,ja aaaaaaa nooooo imaginate que emoción—dice Gaby
—Es que si, por eso a insistido tanto seguro quiere hacer una sorpresa e imaginate que te pida ¡¡¡ser su novia en Nueva York!!!Las palabras de Sofía me han caído como agua helada. Mis manos empiezan a sudar y mi corazón empieza a latir con un ritmo que conozco bien pero detesto, siento en el estómago ese nudo y vacío que se siente cuando hay miedo, nervios y emoción.
Me levanto de mi cama y tomo la botella de agua que he dejado en el buró, necesito tomar agua y aire.
Se que para las chicas eso sería algo bueno y emocionante, probablemente el sueño de cualquier chica enamorada.
Pero para mí no es el comienzo de algo, porque mi historia comenzó hace muchos capítulos atrás, capitulos que ellas por su puesto ignoran, pero que mi mente repite una y otra vez como si de una cinta se tratara. Se que el no saber que demonios somos Christian y yo me tiene en una cuerda floja y a veces me consume la duda de que significa esto realmente para el. Pero entre el miedo y la duda, siempre elegiré la última.
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Desde Altamar
RomanceEl mar y sus tormentas, la tierra y su firmeza, ambos viven en mi...