Después de muchos días viajando, por fin encontré la casa. Me costó verla ya que estaba rodeada de hojas, pero la encontré.
Toqué la puerta y no se escuchó nada, lo intenté otra vez y, está vez, escuché una voz femenina muy desgastada por el tiempo, parece ser una mujer mayor.
-Mathew, ya te he dicho muchas veces que no hace falta que toques la puerta. Aquí siempre serás bienvenido.
Justo cuando termina de hablar abre la puerta, me ve y se asusta.
La miro, al parecer tenía razón, es una mujer con muchas arrugas en el cuerpo, tiene el pelo blanco, que le llega por el cuello, debido a las canas, sus ojos son grises, muy bonitos y su tono de piel es beige.
-Tú no eres Mathew,¿Sabes qué es lo que le ha pasado? ¿Está bien?- me mira muy preocupada.- Niña, dímelo.
-Para empezar mi nombre es Elena Cartwright y he venido aquí para hablar con alguien que sepa de todo esto.-me señalo a mí misma-Si conoces a Mathew, entonces sabrás a lo que he venido.
Me mira fijamente como dudando de si dejarme pasar o no, pero luego me hace un gesto con la mano para que pase.
Nada más entrar, en las paredes hay un montón de estanterías, en las de la derecha hay pociones raras de distintos colores y también instrumentos de laboratorio, y en la otra mitad, hay un montón de libros bastante antiguos.
Luego en el centro solo hay una mesa de madera con muchas hojas de distintos tipos de arboles.
Me siento en una silla y ella hace lo mismo.
-Mi nombre es Cordelia. Seguramente tendrás muchas preguntas en la cabeza.-me mira- Bien, pues has venido al sitio adecuado.
-Lo primero que quiero saber es qué soy, es decir, sé que soy un vampiro pero no sé nada de ellos y, en caso de que haya una cura, dímelo y haré lo que sea para volver a ser como antes, ahora mismo es lo que más deseo.
-Entiendo, lo primero que debes saber es que hay distintos tipos de vampiros y, dependiendo del color que tengan tus ojos, eso define tu rango. El primero, que es el más bajo, se llama Omega y tienen los ojos violeta. El segundo, que son los del medio, se les llama Beta y tienen los ojos amarillos y por último, el rango más poderoso, es el de los ojos rojos-abro los ojos, sorprendida-, y se les llama Alfa.
-Ya veo, pero ¿hay alguna cura para quitárselo? Sé que soy pesada pero es que necesito saberlo para empezar cuanto antes.
-Se ríe- Si hubiese una cura, ahora mismo no habría ninguno.-Se levanta y coge un frasco de la estantería- Será mejor que te vayas, aquí no vas a encontrar nada y, además ya te he dicho todo lo que querías saber.
-Si no hay una cura, por lo menos ¿Cómo puedo aprender mis poderes?
Deja el frasco en la mesa y me mira.
-¿¡Me estás pidiendo ayuda!?,- se ríe- déjame decirte que eso nunca va a pasar. -empieza a sacar líquidos de la estantería.- Tienes que aprender a ser fuerte por tí misma.
Pongo una mano en mi mejilla mientras veo como prepara las cosas.
-¿Qué es lo que estás haciendo?- le pregunto intrigada.
-Estoy intentando hacer una cosa que te va a beneficiar. O, por lo menos, eso espero.- mientras pone las cosas en el frasco, se altera.- Me falta uno de los ingredientes más importantes. Ya le dije a Juan que se nos iba a acabar pronto- se pone una mano en la cabeza.
La miro y sonrío.
-Pues aquí me tienes, señora.-hago una reverencia- A tu disposición. Pero si consigo lo que estás buscando me entrenarás.
Le ofrezco la mano.
Me mira y sonríe.
-Si me ayudas a conseguir ese ingrediente, te entrenaré.
Levanta el brazo y me da la mano.
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The King Of Shadows
Fantasía¿Qué harías cuando tú mayor pesadilla se hace realidad? ¿Podrás combatir tus miedos más profundos? Esto mismo le sucede a Nick, nuestro protagonista, él cree que ese sueño no tiene importancia alguna, pero lo que no sabe es que gracias a esa pesadil...