La siguiente página transcurre entre el capítulo 13 y 14 de la novela original. Dicho todo esto, disfruta de la lectura.
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Dos horas enteras de clase de química con el señor Mason hacían que Mark deseara beberse cualquiera de los líquidos que se encontraban en las vidrieras de su derecha. Eso no sería así si estuviera con sus amigos claro, seguramente si en esa clase hubiera tenido la suerte de estar con Youngjae, Mingyu y Bambam estaría creando su propio crece pelo con ellos.
Sin embargo, estaba ahí solo, con la cabeza apoyada en la mesa contando las burbujas que salían de su recipiente. Unas estruendosas risas le hicieron levantar la vista. Wang y su séquito, dos mesas más adelante reían como idiotas, mientras el señor Mason, que pasaba por las mesas, ya estaba prestando atención a otro grupo. Jinyoung parecía estar contando algo muy divertido, Yugyeom y Jackson le escuchaba con sonrisa maliciosas en la cara, y éste último, igual de preocupado por pasárselo bien que por sus notas, había ordenado a Ahn Somin que creará la fórmula que el señor Mason les había mandado. La muy boba lo hizo encantada.
Mark puso los ojos en blanco y se preguntó cuándo el resto de la humanidad se iba a dar cuenta de lo odioso que era Wang. Mark ahora tenía que soportarlo no solo durante las horas de clase, sino también las no lectivas. Aquel estúpido trabajo de historia y la maldita señorita Lee habían hecho que tuviera que pasar sus tardes en la casa de Wang. Debía reconocer que las últimas sesiones habían sido bastante entretenidas.
Había descubierto la forma de mantener a Wang callado, y era algo muy excitante para él. Pero Wang se había puesto serio con lo del trabajo, y ahora en vez de en su casa pasaban las tardes en la biblioteca. No sería tan suplicio si solo tuviera que contar con sus insultos y desagradables maneras, pero en la biblioteca estaba casi medio instituto y de nuevo Mark tenía que aguantar a animadoras pesadas e imbéciles de turno besar el suelo por donde pisaba.
Ojala Ahn Somin, cuándo acabará la fórmula se la tirara a Wang a la cara. Aunque en realidad, sería una pena destrozar aquella cara. ¡Lo que faltaba! Mark dio un respingo quitándose aquellos pensamientos de la cabeza. Tanta química le estaba afectando. Necesitaba salir de allí.
Se levantó de su silla y se dirigió al armario de productos, fingiendo que iba a agarrar algo para el trabajo de clase. Sin embargo, con disimulo metió la mano en el botiquín, y de allí sacó un bote de antiséptico rojo. Volvió aprisa a su asiento, y agarrando un poco de papel echó bastante cantidad en su mano y en el papel. Después cerró el bote y lo guardó en su bolsillo.
—Profesor Mason. —llamó Mark levantando la mano limpia.
El hombre elevó la mirada, al igual que toda la clase. Incluso Jackson Wang dejó de escuchar a Jinyoung para mirar a Mark.
—¿Si, señor Tuan? —preguntó el profesor.
Mark elevó la mano con el papel manchada de rojo.
—Me he cortado. —se limitó a decir.
—¡Oh cielos! —exclamó el profesor abriendo los ojos de par en par. Y pareció realmente horrorizado. —Vaya a la enfermería inmediatamente.
Mark soltó una risita en su interior. Se apresuró a levantarse y a desaparecer de allí enseguida. Jackson Wang entrecerró sus ojos con la mirada escrutadora. Mark se limitó a mirarlo un segundo con indiferencia, y entonces salió de la clase.
Se lió un cigarrillo metido en un cubículo de los baños. Dejó la puerta entornada, por si pasaba alguien por el pasillo pensara que no había nadie dentro. Cantaba en susurros You Shook Me All Night Long mientras redondeaba el papel. Estaba tan inmerso en lo que hacía que el rápido movimiento que hizo la puerta para abrirse le sobresaltó haciendo que lo que tenía en las manos cayera irremediablemente. La risa de Wang llegó de nuevo a sus oídos. ¿Es que no podía dejarle en paz ese rubio idiota?
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Sólo un paso - 爱 // Markson
FanficPrimer libro de la trilogía. → Sólo un paso - 爱 Mark Tuan y Jackson Wang siempre fueron polos opuestos, como el día y la noche, como el frío y el calor. Ambos son respetados, carismáticos, y queridos por todo el mundo, pero mientras Jackson, capit...