Entre Sombras y Cuerpos Juntos (Andrew x Ashley)

Capitulo 5: Locos

Andrew se despertó antes que el sol saliera, con la mente aún llena de las imágenes perturbadoras de la noche anterior. Se levantó lentamente, asegurándose de no despertar a Ashley. Tomó una hoja de papel y un bolígrafo del escritorio y escribió una breve nota:

"Estaré en el departamento del cultista. Te espero ahí. —A."

Dejó la nota en el armario, sabiendo que Ashley la encontraría. Salió del apartamento en silencio, su corazón pesado con el peso de sus pensamientos. Paso el puente que habían hecho que unía el balcón de ellos con el del cultista.

El departamento del cultista estaba oscuro y lúgubre, con el olor a polvo y humedad impregnando el aire. Andrew encendió una lámpara de aceite que había encontrado, iluminando las paredes cubiertas de símbolos extraños y libros antiguos. Se sentó en una silla de madera crujiente y abrió uno de los libros más grandes, sus dedos deslizándose sobre las páginas amarillentas.

Mientras leía, Andrew se sumergió en los complejos diagramas y encantamientos. Sabía que lo que estaba haciendo era peligroso, pero la desesperación nublaba su juicio. Sentía que no tenían otra opción si querían escapar de la cuarentena que los mantenía prisioneros en su propio hogar.

Unos momentos después, Ashley apareció en la puerta. Tenía el cabello desordenado y los ojos entrecerrados por el sueño, pero la preocupación en su rostro era evidente. Encontró la nota y fue directamente hacia él.

—Andrew, ¿qué estás haciendo aquí? —preguntó, su voz un susurro tenso.

Andrew levantó la vista del libro, sus ojos cansados pero decididos.

—Leyendo —respondió, su tono distante pero no frío. La relación entre ellos siempre había sido complicada, y ahora más que nunca, la tensión era palpable.

Ashley se acercó, inclinándose sobre su hombro para mirar el libro. Los símbolos y diagramas eran perturbadores, pero también fascinantes. Sintió una mezcla de miedo y excitación al ver lo que su hermano estaba haciendo.

—¿Piensas hacer un trato con el demonio? —preguntó, su voz temblando ligeramente.

Andrew asintió, cerrando el libro con un suspiro.

—Creo que es nuestra última opción para salir de aquí. No podemos quedarnos atrapados para siempre —dijo, mirando a su hermana con una mezcla de determinación y desesperación.

Ashley se mordió el labio, pensando en lo que eso implicaba.

—¿Qué le darás al demonio a cambio de sacarnos de aquí? —preguntó, sus ojos buscando los de Andrew.

Andrew bajó la mirada, su expresión sombría.

—Ese es el problema. Necesitamos un alma humana —dijo, su voz apenas un susurro.

Ashley se quedó en silencio, sus pensamientos corriendo a toda velocidad. Miró a su hermano, considerando brevemente la idea de ofrecer su alma, pero rápidamente desechó la idea. Andrew notó el brillo en sus ojos y adivinó sus pensamientos.

—Ashley, sé lo que estás pensando y no vas a usar mi alma —dijo, su tono firme pero cariñoso.

Ashley hizo un puchero, sabiendo que su hermano la había atrapado en su pensamiento más oscuro.

—Solo lo pensé por un momento —admitió, riéndose suavemente para aliviar la tensión.

Andrew sonrió, el amor y la complicidad brillando en sus ojos.

—No vamos a hacer eso, Leyley. No importa qué pase, no vamos a sacrificar a ninguno de nosotros —dijo, tomando su mano con suavidad.

Se rieron juntos, una risa que era tanto un alivio como una liberación de la tensión acumulada. Ashley, siempre manipuladora, aprovechó el momento para acercarse más a Andrew, envolviendo sus brazos alrededor de él y susurrando en su oído.