𝐀𝐋𝐑𝐄𝐀𝐃𝐘 𝐎𝐕𝐄𝐑 | ᶜᵒˡᵉ ʷᵃˡᵗᵉʳ ✓

𝗧𝗥𝗘𝗦, qué pasó entre cole walter y river calflin.

     TODOS SABÍAN que Cole Walter no conseguía sentar la cabeza tras su ruptura con River Calflin y todos culpaban a la chica por eso.

¿Qué demonios podía haber hecho ella para cambiar por completo lo que Cole sentía por ella, por su relación y por sentar la cabeza?

Ella no hizo nada.

Ése era el problema.

Ella no había hecho más que adorarlo a él, a su familia y a su relación, y había estado a su lado antes y después del accidente.

Fue el accidente lo que arruinó su relación.

Pero antes de eso, Cole y River eran uña y carne.

—Recuerda, Summer está en casa, tu padre y yo vamos a salir a cenar, Ryder y Sawyer han salido a montar a caballo y Sierra se quedará a pasar la noche en casa de Hannah—.Dijo Elaina, la madre de River.—Nada de fiestas, nada de beber, nada de drogas, y por favor, nada de Cole—.

River sonrió, asintiendo mientras su madre se ponía los zapatos.—Entendido. Nada de beber, nada de drogas, nada de Cole—.

En ese momento, River y Cole llevaban saliendo un año. Aunque Elaina y Asher, el padre de River, adoraban a los Walter, no sabían muy bien qué harían sus propios hijos sin la compañía de un adulto a su alrededor.

Pero confiaban en River y su hija mayor, Summer, había estado viviendo en una casita en el patio trasero de su casa, así que no tenían por qué preocuparse.

—Te quiero mucho, Ri—.Elaina sonrió, besando la frente de River.—Llama si necesitas algo, pero recuerda que Summer está justo ahí. Así que inténtalo con ella primero—.

River asintió con la cabeza y cerró la puerta de su habitación detrás de su madre. Poco después, la puerta principal se cerró de golpe y la camioneta salió del patio y se dirigió a la carretera.

—¿Se fue?—

River se apartó de la ventana con una sonrisa bailándole en la cara.—Sí, se fue—.respondió River con un suspiro de alivio.

Se giró hacia Cole, que la esperaba en la cama.

—Por fin—,suspiró Cole, acercándola para darle un apasionado beso.

El corazón de River se aceleró cuando sintió la mano de Cole moverse hacia su espalda, apretándola más.

A medida que el beso se hacía más profundo, las manos de River se introdujeron en el pelo de Cole, atrayéndolo aún más.

Las manos de Cole se dirigieron a la cintura de River y tiró de ella para acercarla más.

A medida que el beso se volvía más apasionado, Cole puso a River boca arriba, con su cuerpo sobre el de ella. Ella jadeó ante el repentino cambio de posición, pero él la silenció rápidamente con otro beso profundo, haciéndola olvidar todo lo demás.

Sus manos recorrieron libremente los fuertes hombros y la espalda de él, sintiendo cada centímetro de él.

Sí, se besaban mucho, pero en realidad se gustaban. River no se metería en una relación así si no se sintiera segura.

Realmente le gustaba Cole y creía que él sentía lo mismo. Sabía que Cole sentía lo mismo por ella. No podía negarlo.

Fue ese maldito accidente lo que los separó. Eso rompió a Cole y la razón por la que los dos no habían estado juntos.

—Déjame...—

—No necesito tu ayuda, River—.

Sus ojos eran fríos mientras la miraba.

Ella se lamió los labios y dio un paso atrás.

Cole se levantó lentamente de la cama con River mirándolo... así se sentía. Como si alguien... que ella lo miraba con desprecio, como si él siempre necesitara ayuda. Que era incapaz de hacer algo por sí mismo después de lo sucedido.

Pero empezó a avanzar a trompicones y cuando River dio un paso adelante, él se contuvo. No quería tenerla cerca, no quería que lo viera así.

—Ya lo tengo—.Murmuró.

—Sólo intento ayudar—.

—No necesito ayuda—.Se burló.—No soy un bebé.—

—Estás siendo terco.—

—Y comportándote como una perra—.

La paciencia de River se estaba agotando. Sabía que Cole estaba luchando, pero no podía quedarse de brazos cruzados y ver cómo sufría solo. No era saludable para ninguno de los dos.

—Está bien—,dijo, con la voz teñida de frustración.—Pero no vuelvas arrastrándote a mí cuando te des cuenta de que no puedes hacerlo solo—.

Los ojos de Cole se entrecerraron ante sus palabras.—No necesito la ayuda de nadie—,dijo con firmeza.—Y menos la tuya—.

La había estado apartando desde que empezó la terapia. Tenía que aprender a caminar de nuevo, a usar las piernas de nuevo, todo de nuevo, y ella, sinceramente, no podía soportar el hecho de que lo hubiera estado haciendo y ganando.

—¿Es así como te sientes realmente?—Preguntó suavemente.

—Siento que no estás escuchándome—,dijo Cole, su voz subiendo de tono por la ira.—Así que déjame que te lo explique. No necesito tu ayuda, ni la quiero, ni te necesito—.

Se miraron fijamente durante un largo momento, ambos demasiado enfadados para decir nada más.

River soltó una risita, con la lengua rozándole los dientes por la rabia. Se limitó a asentir, tomar su mochila del suelo y abrir la puerta de su habitación a tiempo para ver a Alex subiendo las escaleras.

Pasó a su lado al salir de la casa Walter e hizo todo lo posible por no cerrar la puerta tras de sí, pero fue en vano.

El sonido hizo que Alex diera un pequeño respingo y mirara hacia la puerta abierta de Cole.

Ella nunca se iba enfadada, era raro que se fuera cuando Cole estaba en esa situación, pero claro, él la llamaba zorra y decía que no la necesitaba.

Poco después, estaba con Erin.

¿Y River?

Todo lo que hizo fue mirar.

Nunca hablaron de su ruptura después de eso. Ni siquiera veían la necesidad de estar en contacto.

La única razón por la que seguían siendo civilizados ahora era porque decidieron no hablar de lo que pasó entre ellos.

Así era más fácil.