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¿Hablar? ¿De que quiere hablar este bipolar? ¿De que casi me ahogo en un río de 2 metros de profundidad?

---No quiero hablar contigo.---yo aún sigo debajo de el.

---No tienes opción ni voto, mia Stella.---susurro en mi oído mandado escalofríos ami médula espinal.

De un momento a otro estoy en su hombro mojandolo. No rechiste, el trauma que acabo de vivir me impide pelear más, estoy temblando y no es de frío, sólo me qued quieta mientras el se dirijia de vuelta a la mansion.

---¿Tan difícil es ser así siempre?---Pregunto burlon.

---¿Tan difícil es mantener tu boca callada?---Dije tartamudeando, aún no superó el trauma. El río.

---Por el momento mantente calladita, mia stella, cuída tu voz que capas te quedes sin ella.---lo último lo murmuró y mi cerebro tardo en entender.

Llegamos ala mansion y el subió conmigo aún en su hombro a la habitacion, me baje y me acorralo contra la pared.

---Tengo que castigarte por desobedecer.---Susurro en mi oído y pude sentir como se mordió su labio.---Eres una provocadora y eres mía.---se alejo de mi oído y me miró.

---No soy tuya, ¿Porque no entiendes?---dije harta de su posesividad.

---Porque si lo eres.---susurro peligroso.---Eres toda mia, Stella.

---¿Que te vuelve loco? Solo tengo 20 años.---Explique.---¿Porque eres así?

---Es tu culpa.

---¡¿Mi culpa?!---. exaltada---. ¿porque mi culpa?

---Si tu culpa, toda tu culpa. Por qué me vuelves loco---Exaltado.---Tu siempre pasando por ahí con tu actitud inocente, dulce y bonita ¿no? Caminar por ahí con ese aspecto que me pone a mil.

---Repito lo de la otra vez. Necesitas ir a un psicólogo urgente.---Río hagachado la cabeza y luego la escondió en mi cuello aspirando mi ¿Olor?

---¿Que te tiene tan mal?---cansada y estresada.---No soy flaca, tengo mis muslos gruesos, caderas anchas, no tengo una cintura perfecta, no soy tan bonita, tengo cachetes rellenitos.---me empece sentir mal al recordar esa época, donde me miraba al espejo asqueada conmigo.

---Eres la perfección y la belleza en una jodida mezcla, Stella.---paso sus manos por mis caderas y cintura.

---Tienes las curvas justo donde deben estar, ¿y que si no eres un palo? Mejor, tus caderas están echas para mis manos, tus cachetes están tan adorables que los quiero morder.---se acercó a mi oído.---te amo por lo que eres y por quien eres. No lo olvides.

Mis lágrimas empezaron a bajar solas, esto no me esta gustando, quiero gritar, llorar ya lo estoy haciendo, quiero separarme de el pero mi cuerpo no reacciona. ¿Qué está pasando?

Vannicelli's obsession Donde viven las historias. Descúbrelo ahora