Capítulo 58: Aprendiendo el uno del otro

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—Finalmente termine—observando finalmente la estancia limpia, llevaba unos días observando a su publicista y lo había ayudado, no era tan difícil, solo era cuestión de practica

También había estado ensayando cocinar, su comida no era que fuera digna de un restaurante pero al menos era comible por lo menos sabía que no terminaría en el basurero como lo había hecho el publicista con unos de sus primero platos

Ese día ella había dado de comer a ambos primos aunque Esteban había fingido que estaba bien, su publicista había sido sinceramente cruel pero eso la ayudado a mejor, solo quería ayudarlo ya que no toda la vida el haría todo por ella

Ya llevaba un mes en aquella casa y no estaba del todo mal, se había acostumbrado a ella y la ausencia de algunas cosas pero le gustaba estar todas las tarde con su publicista, salir de compras con él, ordenar juntos, ir a visitar a su suegra, ayudarlo con algunas cosas del trabajo y la mejor parte del día era que terminara durmiendo con el

—Prepara algo de café—dirigiéndose a la cocina, se sentía tan cómoda y libre, eso era todo lo que necesitaba, no necesitaba tener tanta etiqueta, no necesitaba estar perfecta todo el tiempo, Adam le había dicho que se veía perfecta de todas formas que le gustaba más esa faceta de ella, se veía despreocupada como si nada le afectara

Antes se había vuelto loca si alguien la viera con lo que llevaba puesto que era un mono holgado y una camisa de tiras, su cabello estaba recogido con forma de cebolla, si su madre la viera le daría un ataque al corazón

Pone la cafetera a funcionar y si dirige a la estancia al escuchar que llamaban a la puerta, decide abrir porque estaba esperando a su prima, almorzarían juntas pero aún era un poco temprano, al abrir se sorprende al ver a sus padres que la veían igual de sorprendidos que ella

—Greys ¿eres tú? Dios no te reconozco ¿Qué es esa ropa?

—Semanas sin vernos madre y es lo primero que me dices, también te extrañe—dándoles un lado para pasar—preparaba café ¿quieren una taza?

—Claro hija—tomando asiento—linda casa pero es un poco pequeña

—Es súper acogedora—entrando a la cocina, se suponía que sus padres irían a visitarla para ver su avance con el chico—me encanta—saliendo con las tres tazas

—Pero sí parece una casita de te—la chica toma asiento sonriendo

—Es el hogar de Adam y a mí me encanta, no me importa el tamaño, es perfecta además tiene un buen tamaño para la cantidad de personas que viven en ella

—Supongo que tienes la razón, noto que te encuentras muy bien dentro de lo que cabe—viendo su vestimenta— ¿Por qué la ropa?

—Me hace sentir cómoda y además estaba limpiando un poco

— ¿Limpiando? ¿Ese salvaje te obliga a limpiar? Luis te dije que era una mala decisión que la dejáramos en manos de ese hombre

—No me obliga, Adam me trata como una princesa pero me gusta ayudarlo, lo hago porque realmente quiero hacerlo, de hecho he aprendido hasta a cocinar, te dije que necesitaría esas clases de cocina

—Era algo que no se supone que necesites, debes tener empleados que haga ese trabajo para ti ¿Por qué malgastar tiempo en eso cuando podía invertirlos en otra clases de cosas?

— ¿Qué clase de cosas? ¿Cómo tocar el piano? Eso no me está sirviendo en este momento, no sabía hacer las cosas más básicas y Adam se ha tomado el tiempo para hacerlo ¿sabía que puede dañarse el regular del agua? Adam olvido darle mantenimiento y tuvimos toda una semana sin agua caliente, pensé que esas cosa no eran necesarias ¿alguien lo hace en la mansión?

Enamorandome De Mi JefaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora