PURGAR

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Luego de todo lo que había pasado en la noche, no podías concentrar tu cabeza en nada, te mantenías mirando hacía la pared mientras sentías movimientos de las personas que se encontraban contigo en el departamento, pero no te podía importar menos, lo único que ocupaba tu cabeza era la voz de tú madre a través del teléfono y el pitido agudo que inundó tu cabeza cuando estabas ahogándote, acompañado con la voz d e Andrew gritándote y la mirada indiferente y casi decepcionada de Ashley, decepcionada que no te hayas muerto en ese momento.

Pero lo que parecía imposible sucedió y algo fue capaz de sacarte de tu trance, una tos compulsiva mezclada con sonidos guturales ahogados, sonaba como si se le rasgara la garganta.

-No te preocupes, él siempre hace eso, es un poco dramático.- Te dijo la chica de ojos rosados te dijo mientras te miraba desde el pasillo, su mirada te transmitió apatía, pero no podías evitar interesarte en la situación de todas formas.

La miraste a los ojos, intentando ignorar el sonido de las arcadas de Andrew de fondo
-¿Andrew vomita seguido? ¿Es bulímico?- Preguntaste, era lo que se te hacía más lógico y te hacía mucho más sentido considerando las veces que habías visto a Andrew apenas tocar la comida sobre la mesa. Además no podías mentir de que estabas bastante familiarizado con la bulimia, en el burdel habían muchas mujeres con conductas similares.

-Ojalá fuese eso, Andy solo es un ridículo, ya se le va a pasar.- contestó la chica abriéndose camino a la cocina por una tasa de gaseosa.

Y cómo la chica parecía no darle importancia a que fueras a ver a Andrew, eso hiciste, caminaste derecho hacía la puerta del baño, el chico tenía la puerta entre-abierta, estaba arrodillado frente al retrete, con una mano sobre el y la otra en el suelo para mantener el equilibrio, por respeto, esperaste a que este terminase de vomitar para asomarte sigilosamente por la puerta.

-¿Necesitas que te sujete el pelo?- Bromeaste, sabías que al de ojos verdes volvería a vomitar de repulsión si le mostrabas una actitud preocupada.

-Ja ja, muy gracioso- Te respondió volviéndose hacía ti mientras limpiaba el rastro de saliva en su boca con la palma de su mano -¿Que quieres? ¿Tienes un fetiche con el vomito o estás que te cagas?- Andrew se levantaba del suelo para acercarse al lavabo a cepillarse los dientes.

-Deberías tomar una ducha mejor, ya interrumpiste mi sueño con tus arcadas.- Dijiste cruzando los brazos y apoyándote de espaldas al marco de la puerta.

-¿Acaso quieres bañarme tu?- Respondió apenas modulando, tenía la boca llena de espuma mentolada, aún así se las ingenió para que su voz sonara sutilmente atrevida.

-No soy trabajador de asilo, no baño a viejos seniles vomitados- Dijiste levantando una ceja ante la broma.

-Otro día será entonces.- Susurró luego de escupir el resto de pasta dental en el lavabo, te miró para luego mirar hacia otro lado, era una señal de que salieras del baño y obedeciste.

"Tragos amargos" Andrew Graves (BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora