Me Gustas || Jenlisa

《24》

-Mamá, Rami está llorando- habló Jennie entrando a la cocina con su hermana de apenas días de nacida en brazos quien no dejaba de sollozar ligeramente- pasé por su habitación y la encontré así

-Pero acaba de comer- respondió rápidamente Rosé tomándola en brazos- Jisoo se metió a duchar por eso

-Pues entonces la bebé debe tener cólico porque no para de quejarse

-Le pedí a Jisoo claramente que se los quitara luego de darle el pecho- habló Rosé seria colocando a su pequeña hija sobre su hombro así sería más fácil para ella quitarle los gases- Esta es la segunda vez que lo olvida y mi pequeña bebé es quien paga las consecuencias

-No te enojes mami, mamá está muy cansada- trató de excusarla

-Al igual que yo pero no dejo a mi hija que llore porque olvidé hacer algo esencial- dijo negando con la cabeza al tiempo que daba pequeñas palmadas en la espalda de su hija

-Desde que trajeron a la bebé están enojadas todo el tiempo- habló la cqstaña- pensé que ambas querían esto

-Lo siento- suspiró sabiendo que tenía razón- No es la bebé, solo no tenemos la misma energía que antes y todos nos irrita fácilmente pero sabes que queríamos tener otra bebé

-Hablan como si fueran personas de la tercera edad- rió Jennie al tiempo que giraba los ojos- Lo que necesitan es ayuda en casa no pueden hacer todo

-Desde que Amelia nos dejó no buscamos a nadie más, no confiamos en que nadie se meta a nuestra casa

-Amelia ya necesitaba retirarse mamá, podemos buscar a alguien de confianza o pedirle a alguien conocido que nos recomiende una niñera

-No es fácil meter a una persona extraña a cuidar a mis hijos o andar por la casa

-Deja de pensarlo tanto y es mejor que busquen ayuda- habló al tiempo que apagaba las llamas de la cocina que Rosé tenía encendida haciendo algo para el almuerzo- yo de ti pido algo a domicilio

-Olvidé por completo la pasta- habló acercándose a la olla y viendo como casi toda el agua de la pasta se había secado y cómo esta se había transformado en una especie de masa

-Voy a ir con Lisa mamá- dijo riendo- solo traten de no matarse la una a la otra o quemar la casa

-Trataré pero no prometo nada- habló Rosé molestando- pero voy a regañar a tu madre por haber acostado a Rami sin sacarle los gases

-Lo que tú digas mamá

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-Hola princesa- saludó Lisa apenas diviso a Jennie salir de su casa

-Hola amor- saludó de vuelta apresurándose hacia sus brazos y dejándose envolver en un fuerte abrazo

-Te ves hermosa- fue lo primero que dijo al separarse

-Gracias- dijo sin poder evitar sonrojarse, y es que aunque llevaban casi toda su vida conociéndose era inevitable para cada una no reaccionar de la misma manera a cualquier tipo de cariño o elogio, ambas seguían en la etapa en la que sentían su corazón explotar al ver a la otra y sus mejillas teñirse de rojo por cualquier frase o palabra linda que le dijera la otra- tu también estás hermosa

-Pero no tanto como tú- dijo con adoración- hoy tengo una sorpresa preparada para ti

-Ya quiero saber que es- rió- me lo vienes diciendo toda la semana Lalisa, sabes que odio no saber que vamos a hacer

-Pues ya falta poco para que sepas

-Está bien- dijo haciendo un puchero- dame un beso al menos así lo pienso menos- la rubia rió pero le dio el beso antes de escoltarla al auto y abrir la puerta para que esta se sentara y luego de ver que se colocara el cinturón cerró la puerta para correr hacia la suya