Capítulo 14.

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Dannielle:


Fruncí el ceño y lentamente me senté en la cama, con mucha dificultad camine hacia el baño, no recordaba nada de lo que había pasado.

Me cepille los dientes y me mire al espejo, mi rostro estaba un poco hinchado y un tanto enrojecido. No voy a volver a beber jamás en mi vida, no suelo hacerlo por qué no tolero el alcohol.

Pero anoche, anoche quería beber y terminé haciéndolo. Estaba sintiéndome muy mal, no podía con la culpa, por más que me dijera a mi misma que no, si, si era mi culpa por tener estos sentimientos hacia ellos.

Así es mi vida...

—Un momento ¿Cómo llegué aquí? No recuerdo nada... —me toqué la cabeza.

Salí del baño y al mirar hacia la cocina me quedé paralizada al verlos a ellos ahí, estaban haciendo comida.

¿Que están haciendo aquí?

Me toque el cuerpo y ví que solo estaba en bragas, de inmediato corrí al closet a tomar algo para ponérmelo abajo.

Dios que vergüenza.

—Buenos días nena —dijo Gian— hay café recién hecho y pan tostado ¿Que quieres comer?

—¿C-Cómo es que están aquí? ¿Cómo llegué aquí?

—Primero come —mire a Nigel— luego hablamos.

Me señalaron la comida que estaba sobre la isla de la cocina. Me senté en la isla a comer, ninguno decía nada, yo tampoco por qué me sentía avergonzada.

No tenía hambre pero si necesitaba ese café. Me dolía demasiado la cabeza. Un vaso con jugo de limón con hielo fue puesto a mi vista.

—Es bueno para la resaca —escuche a Gian—, tómalo después del café. 

No tenía cara para mirarlos. No se que paso por que no recuerdo nada, solo se que me fui a un bar cuyo nombre no recuerdo, solo quería olvidarme de mis problemas un rato, pero todo se salió de control conmigo. 

Jamás había sido así de irresponsable conmigo misma, siempre me he cuidado de muchas cosas y anoche, me sobre pase con el límite. Demonios. 

—¿Ustedes me trajeron? 

—Así es —respondió Nigel—, me llamaste para decirme que estabas en un bar bebiendo tus penas. 

—Y a mi me llamaron desde ese bar para decirme que estabas inconsciente, cuando llegamos te estabas bebiendo el agua de los floreros. 

—Gian, no fue así.. —Nigel susurro. 

—No pero casi —dijo el con una sonrisa burlona—, lo que hiciste fue un poco imprudente ¿Lo sabes? 

—Creí que vendrías hacia acá, pero decidiste irte a un bar a beber, sola. 

—Hubieses llamado a aquella amiga ¿Flora se llama? —le preguntó a Nigel, este asintió— A ella, si no querías vernos... Ya sabemos que fuimos unos idiotas. 

—Pero esa imprudencia pudo haberte costado hasta la vida Dannielle, un hombre o cualquiera pudo haberte lastimado o tocado... —el suspiró— Joder. 

Yo no decía nada, por que ellos tenian mucha razon, no debi haberme ido al bar, debí regresar al departamento y beber aquí. Fui una imprudente. 

—Lo lamento —balbucee avergonzada— se que no debí hacerlo y que fue muy tonto de mi parte, estaba muy mal y quería olvidarme de tantas cosas, de verdad lo siento. 

El Dilema de Dannielle. |+18|✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora