{INFILTRED} - Anthony LaRusso

09: Una Noche Inolvidable

Andrew llegó a la casa de los LaRusso con una mezcla de nerviosismo y emoción. Tocó el timbre y, casi de inmediato, Anthony abrió la puerta con una sonrisa radiante.

— ¡Andrew! Qué bueno verte, — exclamó Anthony, su entusiasmo evidente. Andrew le devolvió la sonrisa, sintiendo cómo se relajaba un poco.

— Aquí estoy, — respondió Andrew.— ¿Y tus padres?—

Anthony hizo un gesto con la mano, indicándole que entrara. — Se fueron a casa de mi abuela con Sam. No me apetecía ir, así que tenemos la casa para nosotros solos. —

Andrew asintió, siguiendo a Anthony al interior de la casa. Notó la quietud inusual del lugar. — Está muy silencioso. —

— Sí, es raro, ¿verdad? Pero lo he preparado todo para una noche divertida y exclusiva, — dijo Anthony, guiñándole un ojo. — ¿Quieres que te muestre la casa o vamos directo a mi habitación? —

Andrew sonrió. — Mejor vamos a tu habitación. Quiero dejar mis cosas. —

Subieron las escaleras y entraron en la habitación de Anthony, iluminada por luces LED de un azul intenso. Andrew notó los bocadillos que Anthony había preparado, exactamente sus favoritos. También había una pila de videojuegos y la canción "You are in love" de Taylor Swift sonaba suavemente en el fondo. Anthony rápidamente apagó la música, sonrojándose un poco.

Andrew dejó su mochila al lado de la cama y comenzó a sacar algunos juegos de mesa y cartas que había traído. Al agacharse, vio algo que lo sorprendió: una chaqueta de Cobra Kai escondida debajo de la cama.

— ¿Qué haces con esto? — preguntó Andrew, sosteniéndola con incredulidad.

Anthony se acercó rápidamente y le quitó la chaqueta de las manos. — Es de un chico que me molesta. Se la quité de broma, — explicó, aunque no parecía muy convincente.

— ¿Qué chico? —

— No es importante, yo me encargo de eso, — dijo mientras trataba de parecer lo más convincente posible. — Hay qué seguir con la noche. —

Andrew frunció el ceño, pero decidió no presionar más el tema. — Está bien, — dijo finalmente.

Pidieron una pizza y comenzaron a discutir sobre películas, riéndose y compartiendo sus opiniones. Andrew ganó la discusión sobre qué película verían, eligiendo "IT: Eso". Mientras la película avanzaba, la atmósfera entre ellos se volvió más relajada y cómoda. Andrew se encontró con Anthony recostado en sus brazos, jugando con los rulos del cabello de este sin darse cuenta.

Cuando la película terminó, Andrew todavía tenía mucha energía. Anthony sugirió que le enseñara a jugar a las cartas y Andrew aceptó, apartándose de Anthony para buscar el mazo. Anthony se quejó juguetonamente, pero Andrew sonrió. — Tengo que apartarme para poder enseñarte a jugar. —

Andrew explicó detalladamente las reglas del juego "La carta más alta" y comenzaron a jugar. Después de varios retos tontos y muchas rondas, Anthony finalmente ganó una partida. Sonrió orgulloso y miró a Andrew con una expresión traviesa.

— Está bien, — dijo Anthony. — Te lo digo Andrew tienes que dejarme hacer algo sin molestarte o si planeas golpearme después de esto solo avísame. —

Andrew asintió, curioso. — ¿Qué es? —

Anthony se acercó lentamente, cerrando la poca distancia que quedaba entre ellos. Sin decir una palabra, se inclinó y besó a Andrew. Andrew, sorprendido al principio, correspondió al beso, sus manos viajando al cuello de Anthony para profundizar el contacto.

El beso fue suave al principio, lleno de timidez y emoción contenida. Pero pronto se volvió más apasionado, sus manos explorando el cuello y la nuca del otro, sin querer separarse. El tiempo pareció detenerse para ellos, perdidos en el momento.

La noche continuó con más besos y videojuegos, cada vez más cómodos y cercanos. Finalmente, agotados, se quedaron dormidos en la cama de Anthony, abrazados y con una nueva conexión entre ellos.

La casa de los LaRusso, silenciosa y vacía, fue testigo de una noche que ninguno de los dos olvidaría.