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Habían llegado a unos laboratorios, el lugar estaba lleno de plantas, al final de la habitación, se encontraban una especie capullos verdes con cables conectados, estos eran transparentes, viendo su interior.

- Connor!

Andrew corrió a abrirlo, para abrazarlo.

- Connor, que bueno que estás bien.

- tim...

- aún estás bien.

Sacaron también a Scott.

- debemos de irnos de aquí, quien sabe de quien será este lugar, Connor, tenemos que ir a los laboratorios.

- no!

- Connor, esto no está a discusión, estás enfermo.

- no, no estoy enfermo, estoy bien.

Camino hacia atrás tapando con la pared, y atravesando la, desactivando la electricidad del lugar.

- Connor! Estás bien.

- pensé que ya no tenía poderes.

- Jaime, te encuentras bien.

- que, que es eso de los poderes, ya no los tendré.

- necesito llevarte a un laboratorio para ver ese motivo.

- te estás dañando, tus células se deterioran.

- Bart!

- que, es la verdad.

- pero me siento bien.

- eso es por el cóctel de células vegetales que les di.

Todos voltearon a ver a la mujer que había hablado.

- hiedra venenosa

- no sé cómo encontraron mi guarida.

- adivinare, un parque abandonado.

- cerca, un invernadero.

- Bart!

- Harley! En fin, no saldrán de aquí. Ustedes son muy valiosos para mí.

La tierra empezó a vibrar, emergiendo capullos iguales a los que estaban los chicos.

- Son componentes necesarios para mis hijos.

De los capullos salieron personas parecidas a Connor y Scott, con algunas manchas verdes.

- aún estoy perfeccionando los.

- wow, la clonación si que da buenos atributos

Jaime que estaba a lado de Bart, le tapó los ojos.

- no debemos de dejar que salgan del lugar.

- déjenme lo a mi.

Scott puso sus manos en el suelo, el suelo se torno negro, Pamela Harley y los clones se hundieron hasta el cuello.

- como...

- los sueños que nos pusieron me ayudaron a entender mis poderes.

- y tú Connor.

- ah, si, también me ayudaron.

Giro más por pena por recordar lo que había hecho en sus sueños, y empezó a destruir los muros para destruir todas las anotaciones de la investigación.

Connor KentDonde viven las historias. Descúbrelo ahora