El sol estaba resplandeciente con un cielo despejado y bajo la sombra de los árboles había un viento que lograba que el calor no fuera bochornoso. El enorme patio con el que contaba la Universidad estaba lleno de jóvenes disfrutando de este precioso día, después de pasar días en los que la temperatura es baja. Algunos de ellos lo aprovechan para patear o lanzar un balón, otros diferentes decidían sentarse en el pasto para disfrutar escuchando música, leer, estudiar o hablar en grupo con sus amigos.
Y a quien más se le notaba esa energía positiva era a un alfa de ojos azules que no cabía de felicidad, con una sonrisa que no se ha borrado desde primera hora del día. Hoy no había nada que pudiera hacerlo molestar. Sus amigos estaban tan expectantes ante su comportamiento, porque durante un par de clases y momentos decidió que era buen momento cantar. Sus amigos aprovecharon que tenían un tiempo muerto entre clase y clase para intentar averiguar qué era lo que sucedía.
El grupo se sentó en una banquita con su correspondiente desayuno, Max estaba acostumbrado a no desayunar demasiado, se conformaba con algún café o yogurt bebible, fruta, cereal, galletas para mantenerse así hasta más tarde.
—¿Qué hiciste el día de ayer? — Empezó el interrogatorio por parte de Alex que ya no pudo esperarse a pesar de que Lando y Oscar le pidieron ser prudentes.
—Fui a trabajar
—¿Solo eso? Por qué jamás sonríes, siempre traes cara de culo y... — Los otros dos alfas le dieron un fuerte golpe a Alex para que se quedara callado.
—Eres un imbécil, eres tan sutil como un martillo. — Insulto Norris harto de la actitud de su amigo al lado de él. —Por eso yo pedí hablar primero porque los dos son muy tontos.
—¿Por qué me dices a mí? yo ni siquiera dije nada.
Max estaba presenciando la pelea mientras se acaba su café y un panque que compro, no entendía nada pero tampoco estaba dispuesto a meterse en esa discusión.
—... tu eres el bobo, yo no dije nada y me insultas.
—Entonces cállate ahora, yo seré el que pregunte.
—Yo hice bien, es mejor ser directo. Solo tenemos una hora y estamos perdiendo el tiempo, no quiero quedarme con la duda.
Antes de que empezaran a pelear Max se entrometió entre sus amigos para que se detuvieran y tuvieran un almuerzo tranquilo, no quería cambiar su humor por los disparates de los tres niños frente a él.
—No estoy entendiendo nada, pero dejen de pelear. — Los tres amigos lo miraron entendiendo que solo estaban confundiendo a la persona a la que debían interrogar. —Coman y dejen de hablar.
—Habla tu Lando.
Lando colocó sus manos entrelazadas entre sí, sobre la mesa, se miraron frente a frente.
—Hoy nos hemos dado cuenta entre todos de algo muy evidente, a todos nos sorprendió y por eso queríamos preguntarte. — Los demás se callaron y sólo esperaron a que empezara a preguntar. —Normalmente siempre estás enojado o serio, y el día de hoy no has parado de sonreír por eso queremos saber que has hecho.
Max sabía que era momento de contarles, toda la mañana se guardó este secreto en la punta de la lengua.
—Me descubrieron, tengo algo que contarles. — Sus amigos pararon la oreja para poder escuchar, acercándose lo suficiente. —Ayer en la noche después de trabajar... salí de trabajar y pues se me ocurrió la idea de ir a buscar a el chico del que les hable...
—¿Fuiste a buscarlo? — Dijo sorprendido Norris, no había visto a su amigo ser tan terco para intentar conocer a una persona.
—Si lo fui a buscar, estuve un buen tiempo en el lobby del hotel y no sabía si era lo correcto.
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Dangerous Love
Fanfiction-Chestappen- Max nunca creyó que en una noche de fiesta conocería a un chico del que quedaría flechado a primera vista y que no podría sacar de su mente. Ellos eran de dos mundos diferentes que hacían imposible que los dos tuvieran una relación. Par...