SHY LOVE | Wandanat

25. El caminante sobre el mar de nubes

Estaba a horcajadas de su novia, habían ido a ese paseo en auto que Wanda le había prometido, apenas habían salido de la ciudad, a pesar de que le había expresado que no podía volver a provocarla mientras conducía, Natasha lo hacía de todas formas.

— ¿Recuerdas nuestro primer beso? — Susurró Natasha mientras no dejaba de besar y tocar a su novia

— Mmmmhhmm... — Asintió no sabiendo hace cuánto tiempo estaba estacionada

— No creí que seguirías siendo igual de tímida con el tiempo — Rio con suavidad besando sus labios mientras se acercaba más a su novia

— ¿A qué te refieres? — La vio a los ojos

— A tus manos — Se sentó mejor alejándose un poco — Siempre están en mi cintura o mi espalda o mis brazos — Tomó sus manos mientras hablaba

— Nat... — Bajó la mirada a sus manos unidas

— Sabes que me encanta que me toques, te lo dije esa vez en tu auto, siempre me pongo faldas para ti — Se quejó besando sus labios mientras hablaba — ¿No te atraigo lo suficiente?

— Claro que me atraes, tienes una figura increíble

— Deberías de disfrutar de que eres mi novia y puedes tocarme todo el tiempo... — Posó las manos de Wanda encima de sus rodillas en dirección a sus muslos — Puedes tocar y apretar lo que quieras de mi cuerpo... — Sonrió dejando una mano en su muslo y subiendo la otra por su abdomen — Porque me siento tan cómoda y bien a tu lado que puedes hacerme lo que quieras — Terminó de subir la mano a su pecho e hizo que lo apriete, mientras la seguía besando, sintió la sonrisa de Wanda encima de su boca, no le gustaba que sea tímida, quería que su relación avance en todos los aspectos

— Nat... — Suspiró atrayéndola más a ella, ahí estaban esas mordidas de nuevo, no sabía cuanto iba a resistir

— Me das tanta ternura, Wanda — Sonrió encima de sus labios mientras se pegaba más a ella, sentía las manos de Wanda recorrerla con más confianza

Natasha creía que era la que se sentía más sedienta del cuerpo de la otra o quizás Wanda aún no estaba del todo cómoda con la idea y quería mantener cierta distancia.

— ¿Podemos jugar algo? — Preguntó Natasha cerca del rostro de su novia mientras tomaba el borde inferior del top de su novia

— ¿A qué quieres jugar? — Rio con suavidad con ambas manos en los muslos de Natasha, la acariciaba con las puntas de sus dedos

— Yo te señalo una parte del cuerpo y te doy besos o demás...

— ¿Qué es demás?

— Lo averiguarás si me dejas

— Está bien — Asintió divertida

— Okay... — Posó un dedo encima de los labios de su novia — ¿Aquí?

— Sí — Respondió con una gran sonrisa para después sentir un suave beso, claro que después Natasha lamió sus labios, deslizando la lengua con suavidad en medio de su boca — Mmmmm... — Suspiró apretando sus muslos con más fuerza mientras empezaba a chupar la lengua de su novia

— Apenas estamos iniciando... — Se alejó pasando un dedo por su rostro, por su cuello, en dirección a su torso pensando en dónde lo dejaría — ¿Aquí? — Señaló la parte descubierta de su abdomen

— Sí — Trataba de respirar de manera correcta, sintió una mordida después de verla a los ojos, lamió esa parte descubierta de su abdomen, se alejó dejando unos cuantos besos