- ¡Albi, llegamos, corre!- mi hermana pequeña eleva su voz chillona a la vez que salta emocionada afuera del coche.
- Voy...- susurro cerrando mis ojos en un intento de contar al menos hasta diez mil para calmar mis náuseas.
- Alba, ¿estás bien?- Ainhoa agarra mi mano tirando de mí, pero yo me mantengo firme a mi asiento, como si se tratase de una lancha salvavidas.- Aaalba, vamos- se queja tirando aún más pero yo abro mis ojos fulminándola con la mirada.
- Lo mínimo que podéis hacer, después de, literalmente, obligarme a estar dos meses en un maldito barco, es darme algo de tiempo, ¿no crees?
Odio los barcos. A muerte. Pero, a muerte a muerte. Solo con verlos se me baja la presión y tengo que agarrarme a algo para no caerme, sí y soy la hija de un capitán de barco. Desde pequeña le he tenido mucho respeto al mar, bueno, pánico. Solo imaginarme que voy a tener que estar viviendo encima de él hace que toda mi sangre se esfume. Es que, ¿y si naufragamos? ¿Y si me caigo por la borda, nadie se da cuenta y me ahogo? ¿Y si me come un tiburón? ¡O peor! Me quedo en medio de ellos mientras nadan alrededor mía disfrutando de mi sufrimiento.
- Hija- la voz de mi padre provoca que salga de mi ensoñación y me gire a mirarle, está observando mi expresión con una sonrisa que logra relajarme un poco y me tiende la mano para que salga del coche.- Verás como todo irá bien, y no te comerá ningún tiburón- susurra esto último para que Valeria no se altere al escucharlo.
- Papá, solo seré un estorbo...- intento explicarle por décima vez saliendo de coche, el gran Estrella Polar posa frente a mí como si de una arma destructiva se tratase.- Ay, Dios...
- Alba, estarás bien- me asegura Ainhoa abriendo el maletero para sacar el equipaje, pero yo no puedo apartar la vista del terrorífico barco.
- Es enorme, ¿cómo sabes que no se hundirá?- ella me mira gesticulando un "en serio" y yo solo levanto mis hombros nerviosa.
- Id yendo vosotras- avisa mi padre besando mi cabeza, Valeria agarra con fuerza mi mano.
- Yo te protejo, Albi, no tienes porqué tener miedo- por fin logro apartar la mirada hacia mi hermana, la cual me sonríe orgullosa, la morena ríe levemente mientras camina delante de nosotras.
- Vamos, anda.
- ¡Ainhoa!- nuestro padre llama su atención provocando que las dos nos giremos a ver qué pasa, él hace una mueca con nerviosismo.- La faldita, hija- ella abre sus ojos incrédula logrando que una carcajada salga de mi garganta.
- A que te tiro a los tiburones- advierte mirándome mal.
- ¡Oye!- un escalofrío recorre mi espalda de solo pensarlo.
- ¿A ver, quién le va a dar un beso gigante al tío Julián?- él aparece frente a Valeria agachándose para besar su mejilla y se levanta para hacer lo mismo conmigo, aunque se para a medio camino.- Albita, pareces un fantasma- no se burla, simplemente lo dice preocupado mientras agarra mi cara entre sus manos.
- Me vais a hacer montar en un monstruo- le respondo como si fuera lógico que estuviera así, él suspira negando.
- Espérame aquí y te acompaño yo mismo adentro- yo asiento soltando la mano de la pequeña.- Guapa- le dice a Ainhoa besando su mejilla y lo veo irse a...¿por la bicicleta de Valeria?
- Val, ¿te has traído la bicicleta?- pregunto confusa girándome hacia ella, pero está demasiado ocupada sorprendiéndose con todo lo que nos rodea.
- Mejor no preguntes...- yo asiento hacia la morena volviendo a mirar el barco.- Nos vemos dentro, no escapes corriendo- casi me lo suplica antes de seguir caminando sin mí.
![](https://img.wattpad.com/cover/374677339-288-k127635.jpg)
ESTÁS LEYENDO
El barco
FanfictionAlgo ha sucedido en tierra pocas horas después de que el Estrella Polar zarpara de puerto. Los sistemas de navegación han dejado de funcionar tras una tormenta y Alba Montero tendrá que afrontar esta nueva aventura junto con su familia. Más cosas de...