"¿Qué sucede cuando dos personas comienzan a amarse muy a su manera? ¿Caos, cariño, destrucción, tranquilidad? Solo eran dos jóvenes queriéndoce a su manera ¿Oh a destruirse mutuamente?".
Tal cual ninguno de los personajes me pertenece, todos a acep...
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El camino a la habitación en la que estaban los niños fue silenciosa lo único que se escuchaba eran sus pisadas en la madera.
Aunque no ubieran nada, la mente de ambos estaba llena de pensamientos en conflicto mientras se preparaban mentalmente para lo que venía.
Cuando llegaron a la habitación donde estaban los niños, se detuvieron un instante antes de entrar, tomaron una última respiración profunda y se prepararon para lo peor antes de finalmente abrir la puerta.
La peli-negra volteo a ver al peli-blanco y después a la puerta nuevamente abriéndola, dejo que el más alto entrara para despues cerrar la puerta corrediza nuevamente.
Inevitablemente se acercó a un costado del chico abrazando un poco su antebrazo, no sabía cómo decirlo estaba buscando palabras al sentir las dos pequeñas miradas en ambos.
Sanemi soltó un suspiro entre dientes y se tensó ligeramente cuando ella se acercó y abrazó su brazo, aunque estaba acostumbrado a ser rudo y distante, la tensión en su cuerpo era obvia, mantuvo su expresión seria, no pudo evitar sentir un ligero toque de confort con su presencia.
-Necesito hablar con ustedes Miu, kai.
Fue la chica quien se animo a hablar después de agarrar valor, soltó al chico caminando hacía los niños incandoce frente a ellos.
Ambos se sentaron con las piernas cruzadas y la miraron fijamente, claramente esperando a que siguiera hablando.
-Estaba paseando con shinazugawa cuando llego su cuervo a informarnos algo acerca de sus padres —se detuvo unos segundos para tomar aire— el cuervo nos dijo que sus padres se suicidaron después de que ustedes estuvieran aquí.
Tal vez no tubo cuidado alguno aldecirles esa información y no sabía cómo acerlo haci que estaba tensa mientras los miraba, los dos niños se veían sorprendidos y confundidos ante la noticia.
Kai fue el primero en hablar, con las mejillas llenas de lágrimas.
-Se.. suicidaron?.. Pero.. pero ellos estaban bien.
Miu estaba visiblemente asustada, su pequeño cuerpo tembló ligeramente al oír la noticia.
-¿Pero.. pero por qué lo hicieron?.. No.. no lo entiendo.
La chica seguía tensa no sabía cómo responder sus preguntas, no sabía que hacer.
-Yo tampoco lo entiendo.
En ese momento los tres se quedaron quietos asta que los llantos de la niña comenzaron a oírse, la mayor la atrajo a ella abrazándola y después al niño abrazándolo también mientras los niños lloraban la chica los consolaba como podía.
Los dos niños se aferraban firmemente a ella mientras lloraban con sus pequeños rostros escondidos en su pecho.
Después de un tiempo quedaron dormidos, los recostó suavemente en el futon para acercarse a Sanemi quien estaba aún costado de la entrada a la habitación recargado en la pared mirando, su frente se recargo en su brazo pensando las cosas.
