Cap 10.

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Al parecer las familias de los afectados ya sabían quien fue a ayudarles e comenzaron a darle gracias, aunque la chica ya estaba mejor los Kakushi le pidieron que ahí se quedara un rato para que su cuerpo descansará más

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Al parecer las familias de los afectados ya sabían quien fue a ayudarles e comenzaron a darle gracias, aunque la chica ya estaba mejor los Kakushi le pidieron que ahí se quedara un rato para que su cuerpo descansará más.

Algunos se extendieron ya que comenzaron a llevarles cosas, un señor en especifico se acercó a ella incandoce para darle las gracias.

-No es necesario enserió, es mi trabajo y responsabilidad.

Murmuro tratando de que el señor se levantará pero este solo comenzó a negar el señor al levantar la mirada le sonrió en respuesta.

-¿Tú necesitas algo?, ¿Dinero?, ¿Casa?, ¿materiales?, ¿Ayudantes?.

Él parecía decidido a darle algo a cambio por su ayuda y eso hacía que la chica rechazara cada vez más las cosas.

-Puedo hablar con tu gente, y ayudarles con algunas cosas.

-No, enserió, no necesito nada —su voz salió nerviosa pero aun haci mostró una sonrisa.—

El señor logró dejar de insistir para nuevamente darle las gracias e irse, por el resto del día algunas personas le llevaron fruta y otros la comida.

-Caw caw tenemos que irnos ___.

La chica se levanto de su lugar aunque no sabía cómo llevarse tantas frutas, le dieron una bolsa echa a mano para que alzara todo y eso hizo cuando estaba a nada de salir del pueblo una familia la rretuvo, eran los padres con una pequeña y un niño.

-Porfavor señorita, llevelos con usted —Era la señora de cabello blanco con la pequeña.—

-Ellos en este lugar no tendrán futuro si algo haci vuelve a pasar, son jóvenes pueden acostumbrarse a cualquier costumbre.

Kawagoe se quedo quieta sin saber que decir o hacer, ella no tenía su lugar todavía, no podia aceptar a más personas porque no era su lugar, tampoco podría hacer promesas vacías.

-Esque lo que sucede es que yo, yo, todavía no tengo un lugar propio y no estoy segura de poder aceptar a alguien más.

Lo soltó como pudo ya que su voz temblaba, no quería rechazarlos pero no tenía espacio para más personas aparte sentía que no era capaz de cuidar a los niños.

-Por favor, podemos darles dinero mensualmente pero quiero que esten con alguien que pueda protegerlos.

La señora se notaba también a estar apunto de tirarse a llorar y suplicarle, pero ella no sabía que hacer solo se quedó quieta, tenía tan solo 17 años y no sabía que hacer, los niños se incaron por sus padres.

-Por favor señorita, no hacemos desastres y nos portamos bien, prometemos no ser una carga.

Su respiración se complico cuando los mayores también hicieron los mismo, ella no sabía cómo reaccionar haci que comenzó a llorar también.

Romance. (Sanemi shinazugawa y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora