──★ ˙ ̟ one-shots!!
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¡Escritos con mucho amor y cariño por mi! Todo hecho por diversión, no lo tomen en serio...
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- No acepto pedidos.
- Actualizaciones, probablemente, lentas.
- Contenido explicito, sugerente y cuestionab...
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Ser la novia de un tatuador es agradable la mayor parte del tiempo.
Te gustan todos los diseños que hace, incluso si son tontos bocetos o dibujos elaborados y diseñados para una manga completa.
Te divierte cuando te cuenta anécdotas graciosas, como cuando tiene que tapar tatuajes vergonzosos o nombres de exs.
Pero tu parte favorita es definitivamente cuando ves y tocas los tatuajes alrededor de su cuerpo.
- No es nada especial... - Murmuro mientras trazabas tus uñas por su columna vertebral. Eran lo suficientemente largas como para que le den escalofríos cada vez que lo tocabas.
Estaba acostado boca abajo en su cama compartida mientras tu estabas sentada a su lado, elevándote sobre él para contemplar su musculosa espalda tatuada.
- Me lo hice hace unos años... - Sabía que ni siquiera le estabas prestando atención, más encantada tocando la tinta permanente sobre su piel.
- Los tribales ciberpunk ni siquiera estaban de moda... -
El tatuaje con patrones futurista abarcaba toda su columna vertebral hasta la parte superior de su espalda. Los patrones estaban hechos a la perfección.
- Fue mi primer tatuaje. - Giro su cabeza levemente para verte. Tenias una sonrisa boba en tus labios.
Una parte de él estaba avergonzado por tus determinados ojos sobre su cuerpo, pero otra parte también estaba muy orgullosa de causar ese efecto en ti.
- Yo también quiero uno así. - Murmuraste sin dejar de pasar tus dedos por su columna, subiendo hasta el inicio de su cuello donde acababa el tatuaje.
- Puedo hacertelo si quieres. - Dijo viéndote a los ojos. Le encantaba imaginarte con el cuerpo cubierto de tatuajes, todos hechos por él.
Después de todo, ambos llevan saliendo hace bastante tiempo y tu cuerpo no tiene nada de tinta, ni siquiera una pizca.
- ¿Cuanto me saldría? - Preguntaste poniendo un dedo en tu barbilla, pensando en el precio.
- No seas tonta. Sabes que no voy a cobrarte. - Claro que también lo sabias, pero te gustaba que te lo diga.
Sonreíste complacida por su respuesta y reíste levemente, asintiendo con la cabeza.
- ¿Cuál me quedaría mejor? Vi que muchas chicas se lo hacen debajo del pecho. - Dijiste alejando tus manos de su cuerpo para tomar tu teléfono y abrir pinterest. Empezaste a buscar ideas mientras Genya seguía acostado boca abajo.