Silencio que habla

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Julia

Estábamos en un rincón acogedor del restaurante de pizzas. Nico y yo estábamos sentados frente a una mesa pequeña, la luz cálida del local creando un ambiente agradable. El mesero se acercó con una sonrisa, dispuesto a tomar nuestro pedido.

-Hola, ¿qué les gustaría pedir hoy? -preguntó el mesero.

Nico, con su habitual entusiasmo, tomó la delantera.

-Queremos una pizza grande de pepperoni con extra de queso, por favor. Y también un par de refrescos.

El mesero asintió, tomando nota con rapidez.

-Perfecto, ¿les gustaría algo más?

-No, eso está bien -respondí, mientras Nico asentía a mi lado.

-Muy bien, en seguida les traigo su pedido -dijo el mesero antes de alejarse.

Nico se recostó en la silla, mirando alrededor del restaurante mientras esperaba. Yo observaba la escena, disfrutando del ambiente relajado. Nico sacó su celular de su bolsillo y empezó a revisar mensajes, mientras yo tomaba un sorbo de mi bebida.

El aroma a pizza recién horneada llenó el aire cuando el mesero regresó con la caja. Colocó la pizza en la mesa con una sonrisa.

-Aquí tienen, una pizza de pepperoni con extra de queso. ¡Disfruten!

Nico y yo intercambiamos sonrisas mientras él abría la caja, dejando escapar un suspiro de satisfacción al ver el queso derretido y el pepperoni perfectamente dorado.

-¡Huele increíble! -dijo Nico, sirviéndose una porción generosa y ofreciéndome un pedazo.

-Se ve deliciosa -respondí, tomando el trozo que me ofreció y dando un primer bocado.

Nos acomodamos en nuestras sillas, disfrutando de la pizza y de la compañía. Nico parecía estar en su elemento, charlando animadamente sobre sus planes para el fin de semana mientras yo lo escuchaba, saboreando la pizza y respondiendo de vez en cuando.

-Así que, ¿cómo va el proyecto en el que estás trabajando? -pregunté, mientras mordía un trozo de pizza.

-Oh, el proyecto de diseño gráfico. Va bastante bien, aunque ha sido un poco complicado. Estoy tratando de encontrar el equilibrio perfecto entre la estética y la funcionalidad -dijo Nico, mientras se servía otra porción.

-Suena difícil. Pero seguro que lo haces bien. Siempre he pensado que te va bien para el diseño -le comenté, tratando de mantener la conversación ligera.

-Gracias, eso espero. La verdad es que disfruto mucho de ese tipo de trabajo. ¿Y tú? ¿Qué tal vas en la universidad? -preguntó Nico, mientras revisaba su celular.

-Ah, todo bien. Solo me estoy adaptando a los nuevos cursos. Me ha costado un poco, pero creo que lo llevaré bien -respondí, mientras observaba cómo Nico revisaba su teléfono.

-Los nuevos cursos siempre son algo difíciles. Pero te vas a ir adaptando. ¿Qué es lo que más te está costando? -dijo Nico, mientras volvía a revisar su teléfono.

-Sí, hay uno de estadística que me está volviendo loca. No soy muy buena con los números -respondí, riendo ligeramente.

-Ah, la estadística puede ser un dolor de cabeza. Yo también tuve problemas con eso cuando lo vi por primera vez. Pero una vez que le agarras el truco, no es tan malo. Si necesitas ayuda, siempre puedes preguntar -dijo Nico, mostrando una sonrisa comprensiva.

-Gracias, lo tendré en cuenta. ¿Tienes alguna serie o película favorita que me recomendarías? -pregunté, mientras tomaba un sorbo de mi bebida.

-Claro, te recomendaría una serie que vi recientemente. Se llama "The Expanse". Es un poco de ciencia ficción y misterio, pero es bastante entretenida -respondió Nico, mientras tomaba un pedazo de pizza.

Es solo un amigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora