"Deseo Incontrolable"

Capítulo 9: Reacciones Inesperadas

Después de su exitosa conversación con Jeongyeon, Sana, Mina, y Tzuyu se sintieron un poco más seguras sobre cómo abordar el tema con el resto del grupo. Sabían que aún había desafíos por delante, pero el apoyo de Jeongyeon les daba la fuerza necesaria para continuar. Decidieron que Jihyo sería la siguiente en enterarse, confiando en su papel de líder y su capacidad para manejar situaciones delicadas con empatía y comprensión.

Se organizaron para reunirse en un café tranquilo, un lugar que Jihyo adoraba por su ambiente relajado y acogedor. Cuando las cuatro estuvieron sentadas, la conversación comenzó con una ligereza que ocultaba el nerviosismo subyacente de Sana, Mina y Tzuyu.

—Entonces, chicas, ¿qué está pasando? —preguntó Jihyo, notando que había algo más que la charla casual en el aire.

Sana, que parecía haber asumido el rol de portavoz, respiró hondo antes de hablar.

—Jihyo, hay algo muy importante que necesitamos decirte. Es sobre nosotras... sobre nuestra relación —comenzó, buscando la manera correcta de abordar el tema.

Jihyo frunció el ceño ligeramente, percibiendo la seriedad en la voz de Sana.

—¿Qué ocurre? ¿Está todo bien entre ustedes? —preguntó, su preocupación evidente.

Mina decidió continuar, su voz tranquila pero cargada de significado.

—Todo está bien, Jihyo. De hecho, mejor que bien. Solo que... nuestra relación ha cambiado, ha evolucionado. Las tres —señaló a sí misma, Sana y Tzuyu— estamos juntas, en una relación íntima.

Jihyo parpadeó, claramente sorprendida por la revelación. Sus ojos se movieron entre las tres, buscando confirmación en sus expresiones. Sana y Tzuyu asintieron, confirmando las palabras de Mina.

—Esto es... bueno, inesperado, ciertamente —dijo Jihyo, tratando de encontrar las palabras adecuadas—. Pero... ¿cómo se sienten al respecto? ¿Están seguras de esto?

Tzuyu, quien había estado observando atentamente la reacción de Jihyo, decidió hablar.

—Sí, Jihyo. Estamos seguras. Sabemos que es algo inusual, pero lo que sentimos es real, y estamos comprometidas con esto —explicó, su voz llena de convicción.

Jihyo asintió lentamente, tomando un momento para procesar la situación. Luego, una pequeña sonrisa apareció en su rostro.

—Bueno, si esto es lo que quieren, entonces tienen mi apoyo. No puedo decir que esperaba algo así, pero si están felices, eso es lo que importa —dijo Jihyo, su tono cálido y comprensivo.

Sana soltó un suspiro de alivio, sonriendo ampliamente al escuchar las palabras de Jihyo.

—Gracias, Jihyo. Sabíamos que podíamos contar contigo —dijo Sana, su voz llena de gratitud.

—Claro, siempre —respondió Jihyo, sonriendo mientras las miraba—. Aunque, debo admitir, estoy un poco curiosa sobre cómo han manejado todo esto. ¿Jeongyeon ya lo sabe?

Mina asintió, sonriendo.

—Sí, hablamos con ella primero. Fue... una conversación interesante, pero ella también nos apoya.

Jihyo rió suavemente.

—Puedo imaginarme su reacción. Pero me alegra saber que todo está bien entre ustedes. Solo, por favor, asegúrense de cuidar una de la otra. Esto puede ser complicado, y quiero que se mantengan unidas —dijo Jihyo, mostrando su preocupación genuina.

Tzuyu, Sana y Mina asintieron, comprendiendo la advertencia de Jihyo. Sabían que estaban entrando en un territorio complicado, pero se sentían más seguras al saber que Jihyo y Jeongyeon las apoyaban.

—Por supuesto, Jihyo. Estamos en esto juntas, y lo manejaremos paso a paso —respondió Tzuyu, con una sonrisa segura.

Con el apoyo de Jihyo y Jeongyeon, el camino por delante parecía un poco más claro, aunque aún lleno de desafíos. Pero las tres sabían que, con sus amigas a su lado, podían superar cualquier obstáculo.