mis primeros tacones

CAPITULO DOS.

La boda resulto aburrida para la joven Amalia, su madre habia estado detras de ella, como su sombra, su primo Simon de 15 años no la habia dejado un minuto en paz. Ella no hacia más que mirar a su prima la cual sentada entre sus padres, miraba languida al vacio. Ester la habia regañado agriamente por ponerse las sandalias, su padre siempre permanecia callado, como si no fuera de la familia. Al margen, algo que irritaba a Triana, pero ella timida y callada, solo sabia llorar a solas, o en el hombro de su primita.
Los demas primos ya mas lejanos, eran mayores e iban a su bola. Sara, la novia estaba radiante junto a su ahora marido, el cual apenas abrio la boca hasta beber la tercera copa.
Despues del brindis, y aprovechando el baile, Amalia se escabullo en busca de Triana, que cuando la tuvo cerca, la agarro del brazo, y se la llevo rapido del salon de bodas.
Salieron a un jardin, ambas corrian muertas de la risa, sin poder callar. Cuando estuvieron lo suficientemente lejos, pararon en seco. Sus jovenes corazones, latian agitados por la emocion de aquella mini fuga.
Se tumbaron sobre la hierva.
-"Estaba deseando de escapar"- casi gritó Amalia.
Triana la miro triste, en cinco dias, volaria a Inglaterra, donde vivia la hermana de su padre, divorciada de un inglés, con un niño de 5 años y cuatro gatos.
-"Se que esta pasando por tu cabeza. Tu viaje. Miralo por el lado bueno, conoceras otro lugar, y aprenderas inglés."
Triana suspiró.
-"¿Quieres que me vaya?"- la miro a los ojos.
Amalia se incorporó mirando al frente.
-"No, pero tus padres mandan. Siempre estan con el rollo de que estamos mucho tiempo juntas, y que les importa tanto. Antes no decian nada. Yo no quiero que te vayas, te voy a echar terriblemente de menos. Y.... Triana...prometeme que me escribiras, ya se que te lo dije ayer-" dijo la rubia mirando a los ojos azules de su prima, ligeramente más claros que los propios.
Triana sonrio la tomo la diestra y la acaricio.
-"Todos los dias.-"
Por unos instantes se quedaron mirandose a los ojos. Amalia sentia unas ganas locas de besar a su prima, pero no de esos besos que le solia dar en las mejillas o en la frente, no sabia exactamente el que, pero llevaba meses que era mirarla, y se ponia nerviosa, apenas dormia, y tenia un miedo atroz de no volver a verla.
La jovencita sintio miedo pero aun asi le dio un beso rapido en los labios, y rapidamente evito en mirarla y se puso en pie. Por su parte, Triana, imito a su prima, y se puso de pie a su lado, la cogio la mano.
-"¿Me has besado como a un novio?"
-"No se lo digas a nadie o no volveras al año que viene"
-"Mirame, soy yo, tu prima, la misma de hace unos minutos"
Y apoyo su cabeza en su hombro, como siempre hacia cuando sentiase triste.
La voces de Ester y de Marisa, las hicieron volver a la realidad.
-"Estoy empezando a odiar a mi madre-confeso Amalia."
Volvieron al banquete, ya no tuvieron oportunidad de volver a estar juntas el resto de la velada.