Entre secretos y susurros

4.Sombras de La Sociedad

El Londres de la alta sociedad es un hervidero de chismes y rumores. No pasaba mucho tiempo antes de que la intensa competencia entre Lady Nicola Coughlan y Lord Luke Newton se convirtiera en el tema de conversación en todos los salones.

"¿Habéis oído?" murmuraban las damas en sus círculos cerrados. "Dicen que Lady Nicola ha conquistado más que el corazón de Lord Newton. ¿Será una alianza estratégica o algo más?"

Nicola se encontraba en el centro de todo este alboroto, sin haberlo querido. Cada paso que daba en público era seguido por miradas y susurros. Aunque intentaba mantenerse ajena a los comentarios, sabía que las murmuraciones comenzaban a afectar no solo su reputación, sino también su relación con Luke.

En medio de una tarde nublada, mientras se encontraba en la casa de su amiga Lady Hacelby, Nicola no pudo evitar escuchar una conversación que la dejó helada.

-He escuchado que Lord Newton no es más que un cazafortunas, -decía una de las damas, sin saber que Nicola estaba cerca-. Se rumorea que su familia está en ruinas, y que solo busca una herencia para salvarse.

Nicola sintió un nudo en el estómago. Aunque sabía que los rumores podían ser crueles y exagerados, la duda se instaló en su corazón. ¿Y si había algo de verdad en lo que decían? ¿Y si Luke solo la veía como un medio para restaurar su fortuna?

Esa misma noche, en un evento social, Luke se acercó a Nicola, notando su expresión tensa. Habían estado tan cerca últimamente, y él podía leerla como un libro abierto.

-Algo os preocupa, Lady Nicola, -dijo con suavidad-. Puedo verlo en vuestros ojos.

Nicola lo miró, debatiéndose entre la confianza y la duda. Finalmente, decidió enfrentar el asunto de frente.

-Hay rumores, -comenzó, su voz firme aunque teñida de emoción-. Dicen que vos... que vuestra familia no está en buena posición, y que buscáis una alianza ventajosa.

Luke la observó en silencio por un momento, luego suspiró, y le dijo.

-Es cierto que mi familia ha tenido problemas en el pasado, -admitió, en voz baja-. Pero si pensáis que eso es lo que me ha atraído hacia vos, entonces no me conocéis en absoluto, Nicola.

La intensidad en sus palabras sorprendió a Nicola. Había verdad en su voz, y sintió un peso en su corazón por haber dudado de él. Luke se inclinó hacia ella, bajando la voz para que solo ella pudiera escuchar.

-Lo que siento por vos, Nicola, no tiene nada que ver con mi pasado o mi familia. Es algo mucho más profundo, algo que no se puede comprar ni manipular.

Nicola bajó la mirada, sintiendo la culpa y la vergüenza por haber dudado de sus intenciones. Pero al mismo tiempo, las palabras de Luke la llenaron de una extraña calidez, una seguridad que no había sentido antes.

Sin embargo, las presiones externas no cesaron.La alta sociedad no veía con buenos ojos su creciente cercanía, y las tensiones empezaron a afectar su relación. Nicola y Luke supieron que, si querían superar estas dificultades, tendrían que enfrentarlas juntos, pero las dudas y los desafíos apenas comenzaban.