Sus lágrimas no eran suficientes para demostrar el dolor que sentía, le había rogado varias veces para que se detuviera de lo que estaba haciendo, podía sentir como su cuerpo se partía. Sus piernas estaban más abiertas de lo que comúnmente podía, su pecho se infundía en la almohada del cuarto de su esposo, aquel tipo que en esos momentos no era capaz de reconocer.
—¡Suki!... Para, po-por favor... Me... Du-due' —quedó, las palabras habían sido calladas de su boca para dar espacio a un gemido ahogado, la parte reproductora de Sasuke se hayaba en su interior, le ardía, le quemaba. Lo lastimaba. El gigantesco cuerpo de su pareja apachurraba su frágil ser.
Todo inicio cuando este le dijo que le "mostraría" la cigüeña que iba a traer a sus hijos. No le creía. Pero, en cuanto se adentro al cuarto del mayor fue tumbado brutalmente a la cama, se asustó y no lo niega. Sasuke se montó encima suyo y de un solo tirón le arrancó la playera, lo único que le cubrió fue su lencería negra, aquella que llevaba por el vestido que Karin le dió, no dudó en tapar su cuerpo con sus manos y posteriormente a intentar jalar la sábana y cubrirse bien, cosa que no salió como espera. El Uchiha no lo dejó, en cambio, le tomó de las muñecas y las dirigió por encima de su cabeza.
—¿Sa-Sasuke?
Estaba asustando, se encontraba casi desnudo y muy confundido. ¿Qué le haría?
El azabache acercó su rostro para besarlo, algo que dejó perplejo al Doncel. Debilitó el agarre de sus manos y las llevo hasta la cintura de su esposa. El rubio colocó sus manos encima de los anchos hombros de su marido, profundizando así el beso. Cuando la falta de aire se hizo presente se separaron un poco, la saliva se escurría por los esponjosos labios del rubio.
Sasuke miro la escena que había creado, el Doncel estaba con las piernas abiertas y él se encontraba entre ellas, sus mejillas estaban rojas, y sus labios semiabiertos. En ese momento se le puso dura.
El Doncel sintió algo caliente entre sus piernas, bajo la mirada y encontro un bulto formándose que chocan contra su entrada.
—Talves te duela, o quizás no. Bueno esto debía pasarte.
Y en un sólo movimiento, abusando de su gran fuerza, giró a Naruto poniéndole el pecho arras de la cama y levantando su trasero, la pequeña prenda le estorbaba así que decidió quitársela, o más bien romperla, cuando tuvo paso libre, paseo uno de sus dedos por la entrada de Naruto, tenía que ir al punto, comenzó a exitarlo para que este lubricada, cosa que dio su cometido. En cuanto sintió la viscosidad no se la pensó e introdujo su dedo sin avisar. Algo que hizo que el rubio soltara un pequeño quejido.
—¿Que ~... Pasa? Ah.
Sasuke estaba desesperado, se había follado a la chica linda en un elevador, pero no había sido suficiente, esperaba que Naruto llenara ese vacío. Eso de prepararlo le estaba frustrando, por eso no el gustaba hacerlo con vírgenes, sabía que tarde o temprano comenzaría a disfrutar de ello así que dejó de prepararlo y paso al platillo principal. Desabrochó su pantalón y paso a despojarse de su camisa, libero su exitante miembro que quedó erecto en dirección a la entrada del menor. Metió su aparato en Naruto de una sola estocada, la boca del rubio se abrió a más no poder, pero no emitió sonido alguno. En cambio, Sasuke se estaba pudriendo en el paraíso del placer, Dios mío, la manera inexperta en que el Doncel le paretaba le era reconfortante. Lo admitía, no esperaba nada y aún así no lo decepcionó. El interior de Naruto era suave y acogedor. Incluso podía sentir lo cálido que se encontraba.
—¡Ah!, Sa-sacaló... Me la-lasti *might* —emitió, su gemido resonó por la habitación, su esposo lo había tomado bruscamente de la cintura y pego su trasero a su abdomen con la finalidad profundizar su intimidad.
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Ese Doncel es Mío
FanfictionEs la edición y mejora de mi historia ESE DONCEL ES MIO, aquí tendrá un final diferente y resolveré dudas que no respondí en mi anterior historia. Cuando lobo va ha cazar, de cordero se dizfrazará.