El Omega mimado y el Alfa amargado | Kookmin AU|

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Jungkook le pidió a sus padres y a Yoongi que vayan a la playa y dejen despejado la casa. Y ellos lo hicieron porque sabían que en ese momento Jungkook se acercaría a su Omega.

Le preparó el desayuno exquisito que a Jimin le gustaba, y mientras subía las escaleras empezó a desprender feromonas pasivas.

Jimin abrió la puerta al instante y sacó la cabeza.

Jungkook sonrió al verlo, todo despeinado y mejillas rojas.

— ¿Que estás haciendo?— Jimin le pregunta con el ceño levemente fruncido, olfateando el aire discretamente.

— te dije que traería desayuno — Jungkook responde con la voz baja, tanteando el terreno.

Jimin había estado muy irritable últimamente, y su humor se ponía feroz cuando alguien se acercaba a la habitación. Bueno, solo la madre de Jungkook había podido entrar ya que ella era una Omega.

Los alfas no podían acercarse. Jimin se volvía agresivo.

Jimin miró hacia dentro de la habitación y después a Jungkook.

— soy solo yo mi amor — Jungkook le dice y da un paso más cerca. — ¿Confía en mí? ¿Por favor?

Jimin se le quedó mirando y después cerró los ojos con fuerza asintiendo.

Jungkook sonrió ampliamente y se acercó hasta estar parado frente a frente.

— Dejaré esto dentro — Jimin le recibe la bandeja de comida, y cierra la puerta.

Jungkook se queda cinco minutos afuera dudando, pensando que quizá Jimin se arrepintió y no saldrá.

Una sensación desagradable le invade y tiene ganas de llorar. Realmente lo extraña.

Se queda recostado en la pared y suelta un suspiro.

Antes de rendirse, la puerta de abre y Jimin asoma otra vez la cabeza. Jungkook nota que está vez se ha peinado.

— fui al baño un segundo — explica Jimin, y sale completamente cerrando la puerta tras de si. — yo...quise arreglarme un poco para ti.

— te ves precioso — Jungkook responde. Y Jimin siente sus mejillas volverse mas rojas de lo habitual. — ¿puedo acercarme, mi amor?

Jimin lo piensa unos segundos antes de asentir.

Jungkook acorta la distancia hasta estar a menos de cinco centímetros de lejanía. Pero no lo toca, sabe que aún el Omega está sensible.

Es Jimin quien comienza a tantear el terreno. Primero olfatea su cuello tomándose varios segundos para oler y reconocer.

— Alfa— le dice unos segundos después y los brazos de Omega rodean el cuello del Alfa y besa sus labios.

Jungkook responde al instante dejando que el Omega tenga todo el control.

— Te amo — Jimin le dice entre besos cortos y empieza a sonreír. — ¿Quieres entrar?

Jungkook dijo que si sin poder ocultar su entusiasmo.

La habitación era muy diferente a como Jungkook lo recordaba. Habían varias sábanas en la cama armando un fuerte, en el piso estaba la ropa de Jimin, y algunas posesiones como su bolso y mochila.

Jungkook descubrió rápidamente que no había ninguna prenda suya. Al parecer Jimin se deshizo de todo.

Pero al Alfa no le importó. Él estaba feliz porque Jimin lo dejó entrar a su nido, con su bebé ahí durmiendo.

— por aquí — Jimin le llama.

Jungkook hace un sobreesfuerzo para no desobedecer.

Va donde Jimin y se sientan en el piso, con el desayuno entre ellos.

— estuve pensando — Jimin comienza diciendo, dándole un mordisco a los huevos revueltos con pan. — he decidido ir a la playa, pero tengo algunas condiciones.

— está bien, te escucho — Jungkook responde con una pequeña sonrisa orgullosa.

— Nada de llevar la laptop y trabajar.

— okay, eso no está en discusión.

— si lo está — Jimin hace un puchero. — debes pasar tiempo conmigo y tu bebé. O sino no hay trato.

— okay — Jungkook acepta sabiendo que no tiene poder para luchar con Jimin. De todos modos, después podría seguir en sus negocios. — yo igual tengo una petición.

Jimin deja de masticar y le mira expectante.

— déjame cargar a mi bebé.

Jimin se queda pensando unos segundos y después asiente.

— sí, pero no te lo lleves lejos de mi.

— gracias mi amor — Jungkook responde sonriendo.

Y Jimin asiente también con una pequeña sonrisa.