Find You Again - Pausada Temporalmente-

Capítulo 3

-¡Estás loca! Nunca lo dije en serio- comenzó a gritar- ¡Todo esto es tu maldita culpa!

Nunca lo había visto tan enojado, tenía miedo, mucho miedo, y lo único que hice fue llorar, sacar toda la culpabilidad y ese sentimiento de miedo.

-¡Responde! ¡¿En que estabas pensando?! -No lo sabía, ¿Por qué lo hice? ¡No lo sé! -Lo mat...- no pude escuchar más y lo único que vi, fue negro.

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Mierda.

Otra pesadilla, desde lo que paso, no eh dejado de soñar noche tras noche, una pesadilla diferente.

-¡¿Hija, que paso?!- dijo mi mamá, entrando a mi habitación.

Después de la gran sorpresa de la noche anterior, no eh tenido la oportunidad de hablar con ella, sobre mi día en el instituto.

//Flashback\\

-¡¿Qué está pasando?!-pregunté casi gritando, digo casi porque me taparon la boca.

Si, aja, me taparon la boca. Hoy en día ¡¿Quién le tapa la boca a las personas?!

-Hija calma te, no te alteres, recuerda 1, 2, 3, 4, 5...-comenzó a contar mi mamá -Él es un compañero de trabajo, y me estaba ayudando a hacerte un pastel - lo último lo dijo casi en un susurro- Ya puedes sacarle la mano Jeff - le dijo al hombre que estaba con su mano, sucia en mi boca ¡Iug!

-¿Un pastel? Oh- dije abrazando la, eh ignorando al hombre de traje elegante - Un gusto Señor Jeff, soy Carolina- comenté extendiendo le mi mano.

-El gusto es mío, Carolina, por favor sólo Jeff - dijo estrechando mi mano con la suya- Tu madre me ha hablado mucho de ti- Finalizó

-Bueno está bien Jeff, los dejo solos voy a mi habitación a estudiar - lo dije guiñándole el ojo a mi querida madre.

Jeff, es un hombre de unos cuarenta a cincuenta años, alto, sus ojos son de un color marrón oscuro, un poco bruscos pero transmiten paz, lleva un traje, se ve que es alguien importante, su presencia es dura, pero a la misma vez agradable. No creo que solo sea un "compañero de trabajo" ya que desde lo que paso, mi mamá no invita a cualquier persona a la casa, ya que dice que no todas las personas son confiables y bla, bla, bla.

Después de dejar sola a mi mamá con su visita, subo a mi recámara y apenas tocó la cama, caigo en los brazos de Morfeo.

//Fin de Flashback\\

No podía hablar, aún estaba algo alterada por el sueño, estábamos en silencio, pero mi mamá lo corto.

-¿Otra pesadilla?-dijo sobado mi cabeza, sabía que así me calmaba.

No podía responder, no tenía fuerzas.

Ya no quería, no quería seguir sufriendo día, tras día, por un estúpido error. Todos cometemos errores, no somos perfectos, pero mi error no tenía perdón, ¡me odio por eso!

-Caro, tienes que olvidar, superar, ya basta de hacerte daño a ti misma. Te amo, pero no puedo seguir viendo como no olvidas - dijo mi mamá un poco alterada

-Lo sé, ¡Diablos! Lo sé pero no puedo- comencé a llorar descontrolada mente - ¿Cómo lo hago? ¡Dime como! ¡No sabes las ganas que tengo de no olvidar todo! ¡Quiero dormir y no despertar jamás! ¡Quiero que acaben estos malditos sueños! ¡Quiero volver a ser feliz! - odiaba llorar, lo odiaba, pero siempre necesitamos desahogarnos y ahora lo que más quería era soltar todo el terror que sentía, porque cada vez que tenía esas estúpidas pesadillas me entraba un terror, un terror inigualable al revivirlo.

-Sh, tranquila, estoy aquí, jamás te dejaré sola, y juntas vamos a olvidar, mi niña- me dijo mi madre abrazando me con toda la fuerza que tenía - No lo olvides, tenemos que superar y seguir adelante, juntas.

-Gracias mamá, te necesito y juntas olvidaremos- hablé ya más calmada.

-Te amo mi amor- fue lo último que escuche antes de quedarme dormida de nuevo.

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Al levantarme ya para ir al instituto, me encuentro con mi madre abrazada a mí, en un lado de mi cama, y recuerdo lo de la pesadilla, no soporto y la abrazo aún más.

En serio, no sé qué haría sin mi mamá, es mi única razón para estar viva, no me imagino un mundo sin ella, ¡No lo imagino! La amo, la amo tanto, aunque no se lo diga, yo sé que ella lo sabe. Tengo problemas para expresar mis sentimientos, no soy muy demostrativa.

Si pudiera pedir un deseo, sería que fue eterna. No sé cómo hay chicas, que odian a sus madres, no saben lo valiosas que son, aunque todos pasamos por eso, aunque no lo crean, mi mamá y yo no teníamos una bonita relación, siempre le reprochaba que por su culpa mi papá se había ido ¡Qué equivocada estaba! Pero con el tiempo me di cuenta que ella no tenía la culpa de nada, porque mi supuesto papá, jamás se preocupó por mí, y ella fue quien me crio sola y con su amor, es la única persona en el mundo que no me dejará sola, que a pesar de que haya cometido muchos errores, ella nunca me juzgará y me apoyará en todo. En cambio "mis amigas", bueno si se las puede llamar así, fueron las primeras en darme la espalda.

Ja! Nunca terminamos de conocer a las personas.

-Mi niña, buenos días - Escuche decir a mi madre- ¿Cómo amaneciste?

-Mejor que nunca, mama -le respondí con una gran sonrisa. Tenía que poner de mi parte, para olvidar y superar.

-Me alegro mi amor ¡Levanta ese trasero y baja a desayunar! - Si, aja comenzó de nuevo
-¡¿Mamá, cuantas veces te tengo que decir que no digas trasero tan alto?!-dije riéndome, así es como me sacaba sonrisas.

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Ya estaba llegando al instituto, estaba tan perdida en mi pensamientos, que no me di cuenta que alguien me estaba llamando.

-Hola, necesito hablar contigo - dijo la chica rubia que conocí.

Mmm ¿cómo se llamaba? No ni idea, no recuerdo su nombre.

-¿Quién eres? Y ¿qué tengo que hablar contigo?-proteste, no me gustaba hablar con nadie, además no la conocía, para que hablar con alguien que no conoces.

-Soy tu compañera de historia, y tenemos que hacer el trabajo que mando el maestro - respondió como si fuera obvio

Mierda, el trabajo de la cara de ornitorrinco, lo había olvidado.

Bueno aunque sea tenía que hacerlo con alguien que ya había visto, aunque no me cayera bien, estaba conforme con ella, se veía que era inteligente y aplicada, así que si, que ella haga todo, mientras yo duermo.

Ja! Soy mala.
Basta Carolina

-Cierto, el trabajo del ornitorrinco- comencé a hablar- Primero, dime ¿Cuál es tu nombre?

-¿Ornitorrinco? -preguntó confundida - mi nombre es Kyana.

-El profesor - dije, pero no entendió, ya que su cara de pérdida seguía -El profesor Williams tiene cara de ornitorrinco- comenté con un tono un tanto grosero. ¿No es obvio?

Ella solo río, y asintió con la cabeza como afirmación.

Ya estábamos sentadas, esperando al maestro, compartía la mayoría de clases con Kyana, pero por estar metida en mis pensamientos, no me había dado cuenta ¡Que distraída!

Después de un tiempo, todos se quedaron en silencio, yo pensaba que era el maestro, pero no era ese chico que me intrigaba, con el que me tropecé el primer día, no sé qué era pero me llamaba la atención, y cuando alguien lo hace, es porque es alguien que esconde algo.

-¿Quién es él? -le pregunté a Kyana

-Oh, no querrás saberlo.

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Holaaaaa! !!!! Como están?
Comenten:( me siento forever alone jajajaj

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Acepto todo tipo de opiniones! :)

Carolina en multimedia