-No me lo ponga dificil señorita Almendra-

135 6 1
                                    

Sábado. Me desperté con un dolor de cabeza que no me dejaba ni respirar.

Esos vasos de vodka habían acabado con mi hígado. Me levante y vi que en mi mesa de luz tenia un vaso de agua y un analgésico, Maite realmente me cuidaba. Me lo tome y fui al baño, en el trayecto no encontré a Maite, lo cual no me parecía raro porque ella siempre se levantaba antes que yo.

Volví a mi cama, y en ese momento recordé todo. Obviamente no me había olvidado, había sido consciente de que había bailado muy provocativamente con mi profesor.

Recordé sus palabras "Me tienes jodidamente excitado Almendra". Sonreí y me ruboricé un poco. Yo no era virgen, pero que semejante hombre me dijera eso me había dejado sorprendida.

-Buenas tardes Almendraa- entro saludándome Maite a mi habitación.

-Hola Mai, donde estabas?- le pregunte a mi amiga.

-Me levante a las 10, fui a desayunar a la cafetería de el señor Adam, siguen sirviendo el mejor cafe de la ciudad- me cuenta.

La cafetería del señor Adam era sin dudas la mejor de la ciudad, desde que nos mudamos a nuestro barrio íbamos allí. Realmente servían un café exquisito.

-Ahora amiga, cuentame sobre tu noche- me pregunta ella entusiasmada mientras se sentaba en la orilla de mi cama.

Me puse nerviosa, quería contarle todo lo que había pasado con el profesor a Maite. Pero sentía que lo.. traicionaba? Si, era eso. Quería que ese fuese nuestro pequeño secreto.

-Realmente no fue gran cosa Mai, estuve con un francés que había viajado especialmente para esa fiesta, deberías probar los labios de un francés, son exquisitos- le dije a mi amiga, sintiéndome mal por mentirle.

-Nunca me han gustado los franceses Almendra, me van más los alemanes-dijo ella riendo

-Y que tal tu noche?-le pregunte y ella se puso pensativa.

-Oh, baile toda la noche con Augusto, termine haciéndole una mamada detrás de un árbol, fue excitante de verdad- me contó mi amiga emocionada.

-Detrás de un árbol? De verdad? Que horror Maite- le dije y tire una almohada.

-Deja de hacerte la impresionada, en algún momento te veré totalmente cambiada por un hombre que le harás mamadas hasta en el parque-dijo ella mirándome y yo solo negué con la cabeza.

Y entonces pensé en el profesor otra vez y me imagine a mi misma haciendole una mamada en el parque. Carajo, que mierda estaba pensando.

El fin de semana había pasado rapidísimo, con Maite y James habíamos ido a cenar a la casa de Carter, donde finalmente nos quedamos a dormir.

Maite y yo les comentamos que habíamos echo. James felicito a Maite por haberle echo una mamada a su amigo detrás de un árbol. En cuanto a mi? Solo me habían llamado aburrida.

Obviamente que en ningún momento mencione que había estado con el profesor.

James había terminado la noche en un trio con dos chicas de un colegio de otra ciudad. En cambio Cárter se había ido a la casa de una chica de la clase de literatura y le había practicado sexo oral, no llegaron al sexo ya que los padres de la chica llegaron, haciendo que él termine saliendo por la ventana para que no lo descubrieran.

Al enterarnos de las diferentes pero similares noches de nuestros amigos no nos sorprendimos, ellos eran así y no tenían problemas con ello.

Finalmente el lunes había llegado. Mi despertador sonó, me levante y me duche. Desayune con Maite y fuimos al colegio.

- Un falso profesor - #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora