Idol

Capítulo 18. Aries y Libra.

--"Seguiremos atados hasta que el infierno sea congelado y tus ojos suden sangre" tú decides...!

Lee se estremeció en la escena.

Desgraciadamente, debía reconocer que su socio era uno de los mejores actores de su país y que el guión de la novela de Laura era único...

Y que toda esa pasión y frustración iba dirigida a él.

Rebobinó una vez más el material en el cuarto de edición. La novela estaba ya por finalizar y los 16 capítulos del Kdrama eran una obra maestra.

Ganarían mucho dinero...pero no el suficiente para cómprarla a ella.

Quizás, ya la había perdido.

Quizás, debía aceptar que la historia del "Idol y La escritora" no tendría un final feliz como en sus novelas.

La única certeza que tenía en su vida, es que él jamás la olvidaría. Siempre lo había sabido, pero era muy aterrador reconocerlo en voz alta con su negro porvenir. 

--Lee qué haces aquí nuevamente –JJ lo miró preocupado.

Luego de la noche del Karaoke dónde todos fueron testigos del infierno que Laura llevaba por dentro, los había esquivado como la peste y ellos lo sabían.

Necesitaba más tiempo para interiorizar, de una vez y por todas, que tan solo tenían una "Situationship" una forma de relacionarse en la que existe algo, pero, a la vez no. Hay sexo, pero no una relación como tal.

Lee había caído en un agujero negro nuevamente. Fluctuando entre la pasión desmedida por ella en las noches y sus días de incertidumbre y trabajo excesivo.

--Nada, revisando el proyecto, me guste o no, es mi empresa.

Los otros miembros de los Star 6 entraron en el estudio.

--Con que aquí te escondites –Jim lo miró de manera furtiva.

Lee se pasó la mano por el cabello cansado y quitándose uno de los miles de lentes de leer que tenía regados por todo el edificio. Laura siempre se quejaba de eso cuando vivían juntos en el apartamento y él siempre le decía que era extremadamente cómodo para él que siempre los perdía.

Pero ya no quería hablar más del futuro incierto, su trabajo siempre había sido su refugio seguro.

--No quiero hablar.

--Tranquilo, queremos cuadrar la llegada de las chicas, Sofia nos mandó el itinerario y nosotros queremos que la fiesta de cierre de la novela, coincida con su llegada.

--Ahh sí, sí claro sería genial—Lee inmediatamente sacó su celular para cuadrar las fechas y, a su vez, mandar un memorándum mientras sus amigos lo veían en silencio con preocupación.

Cuando Lee terminó todo y soltó su celular, los cinco restantes lo estaban mirando muy atentos.

--¿Qué? Tengo un viaje a Busan que debo planear por un comercial, no puedo dejar nada suelto para después.

--¿Hasta cuándo te vas a callar lo que sientes? —Rick lo encaró.

Respiró profundo.

--No hay nada que decir, ustedes estuvieron allí en el Karaoke y escucharon lo que me dijo ¿Hay algo más que decir?

--Eso es lo que nos da miedo, tú no eres así, nunca pensé que diría esto, pero prefiero la versión de ti en los meses de su partida a "esto" –V lo observó decepcionado.