One Shots TWICE x Tu

Mina x tu Parte 1

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Choi  ____ se encontraba ahora mismo descansando en la residencia universitaria, con la cabeza apoyada sobre su escritorio. Había pasado toda la noche estudiando para el próximo examen de medicina, que tendría lugar en unos días. Desde pequeña, ____ había sido una chica esforzada y trabajadora. A la sola edad de 10 años, ya se encontraba vendiendo huevos de las gallinas que tenía en su hogar. No nació en una cuna de oro, sino en un hogar humilde en un barrio marginal, donde a veces faltaban la luz, el agua caliente y, en ocasiones, la comida. A pesar de estas dificultades, siempre estuvo dispuesta a estudiar, convencida de que, a través de su esfuerzo, podría sacar a su familia adelante. Fue gracias a esa dedicación que ____ ganó una beca para ingresar en una de las universidades más prestigiosas de Seúl.

—Agh— comentó ____ mientras levantaba la cabeza del escritorio y se estiraba. —¿Qué hora es?— Miró el reloj que estaba sobre su escritorio. —Aún es temprano.

Se levantó y tomó lo necesario para bañarse y cambiarse de ropa. Actualmente vivía en la residencia universitaria, en una pequeña habitación. No tenía los mejores lujos, pero para ____ era suficiente, especialmente porque contaba con su propio baño. Se dirigió al baño, pero no había agua caliente. Sin embargo, acostumbrada desde pequeña a estas condiciones, se bañó con agua helada sin pensarlo dos veces.

Al estar lista, salió de su habitación con sus cosas necesarias y se dirigió hacia donde le tocaba la primera clase. Mientras caminaba por el pasillo de la residencia, una figura se apresuraba en dirección contraria. Era una joven japonesa que venía corriendo, aparentemente preocupada por llegar tarde a clases. Sus pasos rápidos y su expresión de urgencia contrastaban con la calma de ____, quien, a pesar de sus noches de estudio, mantenía una actitud serena y concentrada.

____, tan metida en su mundo, no se dio cuenta de la presencia de la otra chica. La japonesa, por su parte, también iba distraída, lo que causó que ambas chocaran de frente. El impacto fue suficiente para hacer que la joven japonesa cayera sobre ____.

—¿Te encuentras bien? —preguntó ____, mirando directamente a los ojos de la chica que acababa de chocar, y se encontró con Mina, una de sus compañeras de clase.

—Sí— respondió Mina, avergonzada. —Lo siento, no te vi— agregó rápidamente mientras se levantaba y recogía sus cosas. —Voy tarde a clases, y tú también.

—Pero si las clases empiezan en 15 minutos— comentó ____ mientras miraba su reloj. Mina se giró para mirarla, sorprendida.

—¿Qué?— preguntó confundida, y ____ le mostró la hora en su reloj. —Agh, mis amigas me hicieron una broma— dijo Mina, claramente molesta.

Mina suspiró profundamente, visiblemente irritada por la travesura de sus amigas, mientras intentaba recomponerse. Su rostro se tornó de un leve rubor, mezcla de vergüenza y frustración.

—Lo siento por haberte chocado—dijo Mina, evitando el contacto visual por un momento antes de volver a mirarla. —No era mi intención, de verdad.

—No te preocupes, estoy bien—respondió ____ con una sonrisa tranquila, intentando aliviar la tensión del momento. —Al menos ahora sabes que tienes tiempo de sobra antes de que empiece la clase.

Mina asintió, aún con un leve aire de incomodidad, y ambas comenzaron a caminar juntas hacia el aula. Durante el trayecto, hubo un silencio momentáneo que se rompió cuando Mina, más relajada, decidió continuar la conversación.

—Eres ____ ¿verdad?—preguntó Mina, como si intentara confirmar algo que ya sabía. —Te he visto en varias clases, pero no hemos hablado mucho.

—Sí, soy yo—respondió ____, algo sorprendida de que Mina supiera su nombre. —Supongo que no hemos tenido muchas oportunidades para conversar.