BEUTIFUL HEARTS

CAPITULO 21

CAPÍTULO 21: UN ELFO VINO DE VISITA

Lastimosamente los trillizos no tuvieron suerte, pues la primera en levantarse fue Dianett, quien se encaminó a colocar los regalos de sus hermanos sobre sus mesas de noche fijándose en la ventana de su cuarto, la cual tenía unos barrotes que les prohibía si quiera asomarse, y aun que aquello le haya disgustado, no podía opinar, prefería evitar problemas con su tío.

Lilith y Harry no tardaron en aparecer atrás de ella quiénes también observaban la ventana, y luego a la parte de su armario, que estaba lleno de sus cosas mágicas, libros, las jaulas de sus mascotas y los uniformes.

— Esto tiene que ser una broma. — murmuró Harry para luego salir de la habitación.

Lilith y Dianett fueron detrás de su hermano no querían que causará problemas o disgustos hacia su tío, aun peor que los castigaran y les prohibieran todo.

Al bajar a su sala Dianett se apresuró de tomar a su hermano de la oreja antes de que su tío se diera cuenta que estaba detrás de él, llevándoselo de vuelta hacia la subida de la escalera.

— ¿Que crees que haces? — regañó la mediana de los Potter.

— ¿No es obvio?

— No contestes con otra pregunta James Potter. — habló Lilith.

— No tenía porque dejar todo tirado en nuestra habitación. — respondió.

Antes de que sus hermanas respondieran un pequeño ruido proveniente de la sala hizo que brincaran y subieran apresuradamente hacia su habitación dejando atrás cualquier problema que los ponga en desventaja.

Al llegar a su habitación la pequeña gata de Dianett se abalanzó hacia Harry, quien al tenerla encima de él la bajo y la miró disgustado.

— Pequeña rata peluda. — insultó Harry hacia esta.

— ¿Discúlpame? — habló Dianett. — Pídele disculpas a Kira ahora.

— No, tu gata es...amargada como, ¡TÚ! — gritó Harry lo último, para luego huir y encerrarse en el baño, prohibiendo que su hermana lo siguiera.

Lilith miraba la situación en silencio, prefería no entrometerse porque después la agarraban contra ella, así que se quedó callada y se encargo de arreglar el vestuario de sus hermanos, los cuales se encontraban en su armario, su tía Petunia se encargó del vestuario ya que los quería presentes.

— Sal de baño James, recuerda que tu hermana estará preparada para usar la llave si no sales por tu cuenta. — amenazó Dianett.

Harry del otro lado de la puerta temía por sus orejas, no quería que su hermana también le diera con el arco en la cabeza así que lentamente abrió la puerta mostrando una señal de paz, para luego dirigirse hacia Kira y agarrarla en sus brazos.

— Perdóname pequeña Kira, prometo no volver a ser grosero contigo. — soltó el mayor de los Potter, como si la gata hubiera escuchado perfectamente lo dicho, lamió la mano de este y se bajó de sus brazos.

— ¿Ves que fácil era?

— Si Eva, ahora, baja ese arco y métete a bañar. — respondió la pelirroja detrás de ella.

Dianett se dirigió al baño y cerró la puerta de este, dejando a sus hermanos esperando el turno de ellos.

Lilith y Harry parecían tener algo planeado entres manos, sacando de debajo de su cama un regalo, específicamente, dos, un castaño se había encargado de entregarle a Harry el regalo.