Salgo corriendo de mi casa rogando para que pase rápido un taxi y pueda llegar lo más pronto posible al aeropuerto.
No sé como pude ser tan tonta al no decirle todo lo que iba a decirle cuando fui a su casa, pero menos mal aún tengo tiempo.
Veo que pasa un taxi pero por estar metida en mis pensamientos él pasa sin verme. Espero cinco minutos más y por fin puedo agarrar uno, le digo rápido el lugar donde me dirijo y la urgencia con la que tengo que llegar.
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Una vez en el aeropuerto salgo corriendo a la sala de espera donde es posible que él esté. Me detienen al entrar a la sala pero logro convencer a los de seguridad para que me dejen entrar.
Entro y lo veo a lo lejos, no puedo detener los nervios y las ganas de vomitar que tengo en este momento pero lo que tengo que decirle es mucho más importante que un simple mareo.
Cuando estoy a solo unos metros de estar junto a él, paro, respiro hondo y sigo caminando.
Y acá estoy, a solo unos cuantos centímetros de él, me siento muy preparada para esto.
Le toco suavemente el hombro y llamo su nombre, observo como lentamente se voltea y me mira a los ojos. Las náuseas junto con unas lágrimas acumuladas en mis ojos llegan inesperadamente.
-Lanna, ¿Qué haces acá?.-me dice con una sonrisa incómoda.
Me preparo de nuevo mentalmente y le digo:
-Niall, vengo a decirte que no puedes irte, tú no puedes dejarme acá sola.
-¿De qué estás hablando?- Busca mis ojos con los suyos.
-Tú no puedes subirte a ese avión.
-Tengo que hacerlo Lanna, ya he aceptado el trabajo, no puedo rechazarlo ahora.
-Claro que puedes, solo irás a hacer esa maldita entrevista, tienes que quedarte, Niall por favor. - Digo con lágrimas en los ojos.
-Dame una razón por la cual no deba irme, es obvio que tú estás muy feliz con él, no puedo entrometerme entre ustedes.
-Tienes razon Niall, él es como el novio perfecto, es tierno, es amable, es respetuoso, es todo un caballero...
-Pues vete con él si tanto lo quieres.- Me interrumpe, él sabe que odio que lo haga.
-No puedo Niall, YO TE AMO ES A TI. -Respiro hondo para seguir, esto es lo que he querido decirle después de tanto tiempo. -Te extraño. Extraño gritarte. Extraño las discusiones sobre cosas estúpidas. Extraño que seas una mierda conmigo todo el tiempo. Incluso extraño cuando me haces llorar. No me importa si eres o no lo que yo merezco, te quiero a ti en mi vida, no a nadie más.- No tengo ni idea de donde salen esas palabras, pero me alegro, necesitaba decir todo lo que sentía.
Me quedo callada unos instantes para luego continuar.
-No puedes irte porque estoy muy enamorada de ti, ¿Es esa una razón suficiente?
Siento las miles de miradas de las personas que esperan su vuelo pero la verdad no me importa en absoluto.
No he sido capaz de mirarlo a los ojos, respiro y levantó la cabeza para ver su expresión, me arrepiento ahí mismo ya que no es la que esperaba, está ahí, parado con la cabeza en otro mundo sin decir nada. Solo quiero que me diga algo, pero al parecer todo lo que había pensado que pasaría sería otra fantasía más.
En el fondo se escucha la voz diciendo que el vuelo hacia Los Ángeles debía empezar a abordar, y aquí estoy yo, con toda mi dignidad a 10 metros bajo el suelo viendo como Niall lentamente agarra sus cosas y se va, así, simplemente, se va sin ni siquiera decir una palabra.
