Entre los asgariadnos

7.Punto

—Entonces, ¿dirías que está enfadada conmigo? —Asentí mientras miraba a Visión a los ojos.

—No lo entiendo —suspiré, cansada; no había forma de que lo comprendiera. Nat me tocó el brazo, dando a entender que ella se encargaría.

—Bueno, ve con Wanda, pídele perdón y haz exactamente lo que te hemos dicho —dijo Nat. Asentí, dándole la razón, aunque solo quería irme de su cuarto.

—Bueno, gracias, chicas —respondió Visión. Los tres salimos de la habitación. Nat y yo fuimos a buscar a Banner, que estaba en el salón de reuniones viendo la televisión.

—Hola, tenemos chisme —dije. Banner apagó la televisión y se sentó, mirándonos a las dos.

—Es sobre Wanda y Visión —añadió Nat, captando la atención de Bruce.

—Wanda está poniendo a prueba a Visión para que capte indirectas y esas cosas —explicó Nat. Bruce nos miró extrañado.

—¿Por no ser humano? —preguntó Bruce. Ambas asentimos, y él suspiró, entendiendo todo.

—Pobre, seguro que no entiende nada —comentó Bruce. En ese momento, vimos pasar a Visión por detrás del sofá en el que estábamos, pero antes de que pudiéramos acercarnos, sonó la alerta.

—Por lo menos ya estamos aquí —dije. En cuestión de segundos, todos llegaron a la sala. Nosotros tres nos levantamos del sofá, quedando de pie junto a los demás.

—Nuevo villano, no se sabe nada de ella; simplemente amenaza con matar a cien rehenes si no vamos —informó Tony. Todos salieron rápidamente, excepto Banner, que aún tenía algunas lesiones por la pelea con Orión, junto con Pepper, Loki y yo.

—Banner, sigue descansando. Tienes tu tablet en mi sala de trajes; tenía que actualizarla —le dije. Banner se levantó y fue a buscarla. Los demás se fueron lo más rápido posible. Yo fui a mi cuarto por la tablet y, una vez con ella, salí a ver a Loki.

—Otra vez aquí —dijo Loki. Asentí, sentándome a su lado.

—Hay misión —respondí. Él se sentó a mi lado, mirando la tablet.

—Mejor esto que mirar una pared —dijo, tratando de mostrarse fuerte. No me molesté en responder.

—Ha hecho que Steve vaya contra el grupo —continuó Loki.

—Y a Nat y a... —Ambos nos miramos sin entender nada.

—Thor —murmuré. Vi cómo Bruce venía corriendo hacia mí.

—¿Qué haces con Loki? —preguntó Bruce. Me levanté del suelo al mismo tiempo que Loki.

—Eso es lo de menos. Thor está contra los Vengadores, y la hija de puta está sentada en un muro —dije, resumiendo la situación. Mi expresión lo decía todo.

—Tenemos que hacer algo —afirmó Bruce. Vi cómo Banner intentaba transformarse en Hulk, pero puse mi mano en su hombro para detenerlo.

—Hace dos horas te quejabas al sentarte, y ahora quieres pelear con Thor. No puedes —le recordé. Bruce entró en razón rápidamente. Yo volví a coger la tablet.

—Tienen algo en el brazo —le mostré la pantalla a ambos.

—Es un punto, difícil de ver. ¿Qué hacemos? —preguntó Banner, visiblemente preocupado.

—Es un tatuaje —dijo Loki, observando la imagen. Me fijé en ella y sí, tenía un tatuaje.

—Se me hace familiar —dije, intentando recordar dónde lo había visto antes.