X

100 13 61
                                    

Narra Edgar:

Este tío es una caja de sorpresas. No me esperaba que me abrazase en cuanto entrara por la puerta.

He podido oler su colonia. Madre mía, que bien huele... Y no vamos a hablar de su ropa, le queda increíble. Se ha puesto una camisa con la que se pueden notar los músculos de sus brazos y su torso. Lleva algunos botones desabrochados. Fang debe tener a todas las mujeres de esta fiesta a sus pies...

No me extraña. Tremendo hombre.
No me culpéis, teniendo a semejante escultura delante es difícil resistirse.

 No me culpéis, teniendo a semejante escultura delante es difícil resistirse

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


(Aproximación).

Debo tener las mejillas de color rojo rubí, pero sus abrazos son muy reconfortantes. Es muy achuchable. Espero que no se note mucho como me agarro a su camisa.
Puto Fang.

Han pasado un par de horas desde que llegué

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Han pasado un par de horas desde que llegué. Mucha gente está borracha ya. Pft, que poco aguante...
Mires a donde mires hay gente liándose o ligando. Incluido Buster, está más salido que el pico de una mesa.

Justo ahora, Fang está abriendo los regalos que le hemos traído los del grupo. Ha abierto todos, solo falta el mío.

— Espero que sean las llaves de mi casa en la playa. — advierte el cumpleañero, mirándome con vacile en los ojos. Dios, que bueno está. Encima guapo.
— A lo mejor son las llaves de mi corazón, bombón. — bromeo y le guiño un ojo, aunque puede que algo de verdad si que haya. Fang se ríe.

Vale, no voy a mentir. Me gusta un poco Fang. No sé cuando empecé a darme cuenta, pero no tengo intención de decírselo.

Un chico como él no se fijaría en .

Volviendo al tema, Fang saca de la bolsa lo que Colette y yo hemos envuelto antes. Hace un puchero con los labios al ver que no tiene forma de llave de casa. Empieza a romper el papel de regalo. Cuando lo quita por completo, abre la boca lo máximo que puede y lo sostiene en sus manos mientras lo mira fijamente.

— ¡Qué monada! — dice Maisie, llevándose las manos a la boca.
— Le has dado en el clavo, Edgar. — añade Draco, dándome un golpecito con el codo en el brazo.

Caminos cruzados  ⌗ ₎ ˊˎ-  (Edgar x Fang)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora