Promesas

Capitulo 56 y 57

―¿Es...-Niall no podía procesar con claridad lo que le acababan de decir. Le costaba tragar-...una broma?
―No-Le contestó Louis-No lo es. Vas a ser padre con dieciocho años.
―En teoría-Intervino Danielle-dentro de nueve meses ya tendrá diecinueve.
Ajenos a aquella tontería, los ojos de  Camille  chocaban contra los de Niall y las pupilas de este se profundizaban sobre las de  Camille  con un brillo especial. Su interior quería seguir gritando hasta quedarse sin voz, pero contrariamente, ahora quería hacer por la emoción, por la felicidad que había aparecido tras escuchar a  Camille  decirle aquellas palabras: "Este bebé es tuyo y de nadie más."
Sus labios se tensaron y una temblorosa curva se dejó ver ante la atenta mirada de todos. Acarició la mejilla de  Camille  con dos dedos y ella sintió aquella sensación de bienestar que le había faltado durante tanto tiempo. Sabía que en poco tiempo todo volvería a estar en su sitio, que todo volvería a ser casi como en un cuento de hadas.
―Repítelo―Le pidió―Vuelve a decirme que soy el padre de tu hijo.
 Camille  esbozó una sonrisa.
―Eres el padre de mi hijo.
Y seguidamente, fueron los brazos de ella rodeando el cuello de Niall, los de él abrazando la cintura de  Camille  y elevándola, y los labios de uno fundiéndose en los del otro.
***
―Dime que es un sueño, dime que esto no es real―Le susurró, con los ojos cerrados y con una sonrisa indescriptible en su rostro.
 Camille  se encontraba sentada en el sofá mientras que Zayn y Jazni habían salido a comprar ingredientes que faltaban para hacer la comida, Ro y Danielle preparaban la mesa y sacaban lo que había de comida en le nevera y el congelador, y Harry y Louis se encargaban de obedecer las órdenes de las chicas limpiando todo lo que Niall había roto horas antes. Este se había recostado en el sofá y había colocado su cabeza en las piernas de  Camille  , le había subido un poco la camiseta y ahora le besaba el vientre mientras ella sonreía.
―No es un sueño―Le contestó, acariciándole la mejilla―Es real. Vamos a ser papás, Niall.
―No puedo creerlo―Le dio otro besito en el vientre.  Camille  sonrió aún más.
―Yo tampoco...
Danielle le dio un codazo a Rosario y la avisó para que contemplara la tierna escena.
―¿Qué quieres?
―Quiero un niño―Le respondió  Camille  .
―¿Un niño? ¿Y hay alguna razón por la que quieras un niño?
―Quiero un Niall pequeñito.
Niall se estremeció ante la dulzura y alzó la cabeza para besarla. Ella llevó las manos hacía la nuca de el y enredó sus dedos en su rubio pelo.
―Pues yo quiero una niña―Susurró sobre sus labios, luego le dio otro beso―Por la misma razón que tu quieres un niño.
* * *
―Esto es todo lo que han dicho que hay que comprar, ¿no?―Preguntó Zayn, cargando con una bolsa llena de comida.
―Si―Contestó Jazni―Ves yendo hacía el coche, yo tengo que ir al baño. Enseguida vuelvo.
―Vale, no tardes.
Jazni le guiñó un ojo y cambió de dirección para adentrarse en los lavabos para chicas del supermercado. Cinco minutos después se acercó al espejo y se arregló un poco el pelo, se puso algo de gloss en los labios y...
Golpearon la puerta.
―¡Ocupado!―Gritó ella, pero la puerta se abrió. Dirigió la mirada hacía allí, indignada―He dicho que...―Abrió los ojos y se dio la vuelta por completo―¿Qué haces aquí? No puedes estar aquí.
―Ya lo sé, no soy estúpido―Le contestó Zayn, cerrando la puerta con pestillo. Jazni no despegó la mirada de él―Mira lo que acabo de comprar―Zarandeó un condón en su mano. Ella alzó una ceja.
―Ok. Me alegro. Yo ya he terminado aquí, así que si me haces el favor de abrir...―Zayn le barró el paso y la volteó, la espalda contra la pared―¿Qué...?
―No me digas que no te da morbo hacerlo en un lugar público.
―¿Estás loco?
―Tú me vuelves loco―Y antes de que ella pudiera replicar Zayn le había robado un beso apasionado que la dejó sin aliento.
Segundos después se había desprendido de su camiseta. La había acorralado y la había subido entre sus brazos, haciendo así que ella rodeara con las piernas su cintura. Volvió a atacarla comiéndole la boca. Zayn soltó un quejido cuando Jazni le mordió el labio inferior. Ella rió.
―Dame eso―Le arrebató el condón con una mano y rompió el envoltorio con los dientes.
―La próxima vez que vuelvas a hacer eso te juro que te hago llegar al orgasmo en menos de diez segundos.
―Recuérdamelo―Se bajó de los brazos de Zayn, le desabrochó el pantalón, le bajó los bóxers y viendo su erección de caballo le colocó el preservativo, sintiendo como el gemía echando la cabeza hacia atrás. Jaz se deshizo de su ropa mientras Zayn se masajeaba lentamente su miembro y luego fue directa hacía él. Zayn volvió a cargarla y a estamparla contra la pared. Le dio un beso adormecedor en la boca y la penetró. Jazni soltó un grito y Zayn la miró mal.
―Eres tu el morboso que quería hacerlo en un lugar público. Así que no me mires de esa manera.
Zayn hizo una mueca y comenzó a mover su pene dentro de ella, entre sus paredes vaginales, las que se ajustaban perfectamente a la erección dura y latiente de Zayn. Este jadeó. Jaz se aferró a él y las penetraciones se intensificaron. De un momento a otro eran embestidas y ella no podía reprimir sus gritos. Zayn abrió más las piernas de Jazni solo para él, para tener más acceso. Le pasó un dedo por el clítoris y aquella fue la gota que colmó el vaso.
Jazni se fundió en un intenso orgasmo y Zayn la siguió después. Se escucharon varios golpes en la puerta pero los ignoraron. Pese a estar agotado, Zayn la mantuvo sobre él varios minutos más, hasta que ambos abrieron los ojos, se miraron y compartieron un necesitado beso. Zayn lo mantuvo largo, pero a pesar de apasionado y cargado de lujuria, también había algo más que empezó a gustarle a Jazni, algo que él nunca le había ofrecido.
Cada uno se volvió a poner su ropa, se echaron un último vistazo en el espejo antes de salir y rieron.
Cuando abrieron la puerta se encontraron de pleno con una mujer de unos sesenta y cinco años mirándolos con mala cara, apunto de fulminarlos con la mirada. Zayn agachó la cabeza y salió a toda prisa de allí escuchando las risas de Jazni detrás de él.

•Capítulo 57

―Hay que empezar a embarcar ya―Avisó Harry.
―Sí, vamos―Louis se cargó su maleta tras la espalda y se acercó a él.
―No, un momento―Los paró Rosario―Faltan Niall y  Camille  . No podemos irnos sin despedirnos.
―¿Dónde están?―Preguntó Danielle, separándose de Liam y echando un vistazo alrededor, a toda aquella multitud de gente.

* * *
―Te voy a hacer de todo estos días, cariño...―Le susurró Niall, sonriéndole y apunto de besarla.  Camille  se apretó contra la pared.
―No me pongas impaciente.
―Ya sé que no puedes esperar. Nadie podría teniéndome como novio.
―Y como papá de mi bebé― Camille  dejó que una enorme sonrisa apareciera en su rostro.
Niall se inclinó más hacía ella, copiándole la sonrisa, acariciándole el pelo y la besó, juntando sus labios con los de ella, como dos imanes, atrayéndose los unos a los otros, un encaje perfecto. Niall le besó la mejilla, dejó un recorrido de besos por su cuello, pasó por el valle de sus pechos por encima de la camiseta azul que llevaba  Camille  y cuando llegó a su estómago, levantó una parte de tela y le besó el vientre.
―Me encanta que hagas eso―Le dijo, observando la boca de Niall sobre su piel.
―¡Eh!―Louis apareció por una esquina y Niall se levantó de inmediato,  Camille  se acomodó la ropa tratando de no sonrojarse―Oh, Dios mío... ¿Teníais que entreteneros con esas tonterías ahora?
―Puedo entretenerme con la madre de mi futuro bebé cuando y donde quiera―Se defendió Niall.
―Ya... Bueno, que nuestro vuelo está a punto de salir y los demás están esperando para despedirse. ¿Venís?
―Sí, vamos― Camille  entrelazó los dedos de su mano con los de el rubio. Se dieron un beso y siguieron a Louis hasta los demás.
―¿Dónde os habíais metido? ―Preguntó Ro.
―Solo estábamos comprando un par de golosinas para comer durante el viaje―Mintió Niall.
―¿Las golosinas son buenas para las embarazadas?―Preguntó Harry.
 Camille  se encogió de hombros.
―Si me pasa algo...
―No te va a pasar nada―Niall rodeó la cintura de  Camille  con sus brazos y le besó el cuello. Ella sonrió y colocó sus manos sobre las de el, en su vientre.
―Pasajeros del vuelo 41 16 con destino a Inglaterra. Último aviso para embarcar.
―¡Mierda!―Gritó Louis―¡Vamos a perder el avión! ―Corrió hacía Niall, le dio un abrazo amistoso y luego besó la mejilla de  Camille  y le deseó suerte. Diez segundos después ya había desaparecido tras la puerta de embarque.
―Echa de menos a sus papis―Se rió Zayn―Necesita llegar ya a Inglaterra para poder abrazarlos.
―No te rías de él―Le replicó Jazni―Seguro que tu también estas deseando ver a tus 'papis'...―Zayn la fulminó con la mirada, ella le sacó la lengua.
―Espero que todo vaya bien―Dijo  Camille  , abrazando a Zayn.
―Te diría lo mismo pero seguro que cuando vuelva a verte dentro de dos meses estarás más gorda que una vaca.
―¡Oye!― Camille  le pegó en el pecho―En dos meses no habré engordado nada.
―Ya lo sé, tonta. A no ser que Niall no dejé de mimarte ni un solo segundo y acabe dándote de comer todo lo que pidas. He oído que a las embarazadas les aumenta el apetito.
―No pasa nada. Seguro que Niall sabe controlarme. Así que no tienes nada que temer. Cuando vuelvas a verme estaré igual de plana.
―No me importa,  Camille  . Sabes que tanto delgada como con quilitos de más voy a estar ahí esperando para ver a ese bebé―Le dio un beso en la mejilla y se despidió.
Así hasta que tan solo quedaron Niall y  Camille  zarandeando sus manos y despidiéndose desde la lejanía de sus amigos.
―Los pasajeros del vuelo 13 42 con destino a Paris ya pueden empezar a embarcar por la puerta tres de la terminal 2.
Niall y  Camille  se miraron con los ojos abiertos.
―¡Es el nuestro! ―Gritaron. Ambos rieron y se cogieron de las manos. Empezaron a andar hacía la terminal indicada y una hora después se encontraban rumbo a la ciudad del amor.