Noah
El sonido de los golpes en la puerta me hicieron moverme en la cama. Ethan tenía la cabeza encima de mi pecho y su brazo me rodeaba la cintura. Hacia mucha calor en la habitación
-¡Ethan! levantate o entro- dijo una voz desde afuera-Ethan- dije quitándole la mano para levantarme.
-5 minutos más por favor- dijo Ethan entre sueños
-¡Ethan!
-Papá ya voy- dijo Ethan abriendo los ojos
<<Oh dios mío el señor Evans estaba aquí>>
-Ethan, me va a ver contigo- dije con un susurro
-Nada que no supiese antes- dijo Ethan como si nada atrayendome hacia él
-¿Como? ¿Tu padre sabe de lo nuestro?
-No, pero ahora lo sabrá- dijo con una sonrisa socarrona dándome un beso en los labios.
Después de levantarnos fui al baño, me cepillé el pelo y me lavé los dientes.
Cuando salimos de la habitación estaba el padre de Ethan tomándose un café en el salón
-Oh Noah, cariño, siento despertarte no pensé que estuvieras aquí- dijo el señor Evans levantándose hacia mí y dándome dos besos.
-No se preocupe señor Evans ya estábamos despiertos- dije nerviosa.
-Llamame Andrew querida
-Lo siento Andrew- me disculpe avergonzada
-Papá, a qué viene tanto jaleo tan temprano- dijo Ethan dirigiéndose a la cocina y cogiendo un zumo de naranja de la nevera
-Ya es mediodía, hijo, además es de mala educación que venga yo de visita y no me recibas como es debido- dijo el padre de Ethan tomando su café.
-Oh Noah, querida, déjame decirte que estoy encantado con el trabajo que estás haciendo. Si no fuera porque mi hijo me echaría la empresa encima te hubiera llevado a mi empresa para que trabajes para mí.- dijo el señor Andrew con una sonrisa divertida
-Ni hablar- dijo Ethan al otro lado de la cocina.
Andrew soltó una carcajada haciendo que yo también me ría.
Después de desayunar me dirigí a la habitación para vestirme. No podía creer que toda esa ropa era mía. Cada prenda costaba todos mis ahorros. Me decanté por una falda corta con botones burdeos y una blusa con volantes en las mangas negra de seda. cepille mi cabello haciéndome un semirecogido y me calcé unas sandalias negras sin tacón. Afuera estaba Ethan ya preparado esperándome.
-Noah- dijo el señor Andrew al pasar por su lado.
-Estoy muy feliz de que estés aquí- dijo con una sonrisa. Asentí dedicándole también una sonrisa y me despedí de él saliendo por la puerta.
-Hoy es tu dia de suerte- dijo Ethan entregandome las llaves del ferrari rojo que habia enfrente mia.
-Estarás de broma- dije sin poder creer que me estaba entregando las llaves de su coche
-Alguien me dijo un dia que quería conducir este coche, si no me equivoco- dijo Ethan con una sonrisa
-Dios mío, gracias, gracias , gracias - dije colgándome en su cuello sin poder creerlo.
Era un coche precioso, nunca había conducido algo semejante y había pasado de verlos en películas a montarme en uno.
El sonido del motor hizo que subiera mi adrenalina pise el freno y sali de parking a tota pastilla
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DESTINADOS A PERDER
Romance¿Quién me iba a decir que yo, Noah Clare, iba a ser la secretaria de una de las empresas más famosas y relevantes del mundo y lo más importante de todo, tener un jefe tan atractivo, sexy, arrogante y maleducado? Así es, Ethan Evans era mi jefe y el...