Todo de nuevo

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Bautista miró con incredulidad el papel que tenía ante sus ojos y levantó la vista listo para protestar. Sin embargo, Paula, su representante, estaba preparada para el ataque y no le dio tiempo a decir nada.

- Deberías estar agradecido de tener la oportunidad de poder alejarte un tiempo de todo esto, en lugar de protestar como un nene caprichoso.

Miro a sus costados buscando hacer contacto visual con sus hermanos, que estaban a su lado en el sillón, pero ninguno parecía tener la intención de intervenir en su auxilio.

-Dejame ver si entiendo... ¿Me estás mandando de castigo a Trelew? No sé ni dónde queda eso.

-No es un castigo, Bauti. Es lo que necesitas en este momento para poder volver a poner tu vida en orden. Terminaste con los shows pactados, gracias a Dios, y las entrevistas no son difíciles de posponer. Es el momento ideal para que te ocupes de vos mismo.

-Pero es que eso es lo que no entiendo, estoy perfecto -Argumentó Bautista que no tenía la más mínima intención de moverse de Buenos Aires, no cuando recién terminaba su gira y estaba en un gran momento para seguir trabajando en su nueva música.

-Quizá tenemos una percepción distinta de lo que es estar perfecto. Salir en todos los portales fin de semana tras fin de semana de fiesta en fiesta y alcoholizado es una cosa. No me gusta, pero entiendo que sos adulto y no puedo entrometerme en tu vida privada. Ahora, lo que pasó el viernes no puede volver a repetirse. -Paula alejó sus lentes de sus ojos y se apretó la nariz, frustrada -. Y no te lo digo como tu manager, bauti. Te lo digo como alguien que te quiere y te respeta, te estas destruyendo y tengo miedo de que en algún momento sea tarde.

Bautista se quedó mirándola incómodo, sin saber cómo responder. Pensándolo bien, prefería cuando Paula lo retaba y le decía que hacer porque era fácil enojarse y responder. Pero no sabía que actitud poner cuando jugaba la carta de preocupación.

-Pensalo así, Bauter -interrumpió su hermano menor-. Podes llevar tu guitarra y escribir canciones para el nuevo álbum. Nadie te pide que te alejes de la música o que estés incomunicado. Son solo unos días en un lugar más tranquilo para que puedas desintoxicarse de todo este ambiente.

-Hace unos años te encantaba pasar el tiempo con tu guitarra, tranquilo. ¿Te acordas? -Catalina, su hermana, le preguntó con una sonrisa nostálgica.

La verdad es que sí. Tenía razón. Hace un tiempo, cuando la fama no era tan asfixiante y los compromisos eran menos, le encantaba pasar algún fin de semana en Uruguay con su familia y sus amigos. Tranquilo, en el mar, tocando la guitarra y pasando tiempo de calidad con sus seres queridos.

Ni siquiera se había puesto a pensar en aquellos momentos hasta que su hermana lo sugirió. Anotarse en Gran Hermano había sido una idea fantástica. Hasta ese momento, había podido dedicarse a la música, pero con un público mucho más reducido. Después de ganar la realidad es que todo había sido relativamente fácil para su carrera. Y caótico.

Las entrevistas y los streams, las presencias en boliches, los seguidores de a miles y la posibilidad de tocar en lugares cada vez más amplios le habían permitido vivir el sueño de tener una audiencia multitudinaria y de vivir al cien de su música. Cosa que agradecía. Pero también había tenido sus dificultades.

El tiempo para pasar con su familia y amigos se fue acortando cada vez más, como las posibilidades de estar tranquilo con él mismo. Mudarse a Buenos Aires había sido el paso lógico en su carrera y rápidamente se había visto envuelto en la vertiginosa vida porteña. Lo que, en resumidas cuentas, lo había llevado a la situación actual.

Quizás la propuesta de Paula no sonaba mal, después de todo. Además, viendo que se encontraba en una posición inamovible, no es como si tuviese una alternativa.

- ¿Y por qué Trelew? ¿Se puede saber? -Preguntó, resignado.

La tensión en los hombros de su representante se alivió al percibir que había ganado la disputa y, más entusiasmada, respondió -. Fue el único lugar que tenía vuelos disponibles para esta misma noche.

- ¿Esta misma noche? Veo que te queres deshacer rápido de mí -Intentó bromear Bautista.

-Mientras más rápido desaparezcas de Buenos Aires, más rápido van a dejar de hablar de vos. Tenes solo una tarea allá, nada de escándalos ¿entendido? Toca la guitarra, lee un libro, anda a la playa, lo que quieras, pero no quiero que aparezcas en un solo canal de televisión o portal de internet el tiempo que estés allá. -Paula lo señaló con un dedo.

Bautista asintió distraído mientras googleaba información de lugar-. No te preocupes porque por lo que veo ni haciendo fuerza voy a protagonizar un escándalo. No se ve nada interesante.

-Mira Bauter, al parecer tienen el dinosaurio más grande del mundo. Por ahí le podes escribir una canción de amor -. Comentó Juan Cruz entusiasmado y le pasó su celular para que vea.

-Que divertido -sonrió Bautista sarcásticamente-. Ahora, si me disculpan, tengo unas valijas por hacer. ¿O queres hacerlas vos por mí, ya que fue tu brillante idea? -Preguntó mirando hacia Paula.

-Tus escándalos, tus valijas -Respondió antes de levantarse e irse -. Ah, una última cosa, no te voy a decir que no uses tus redes porque sé que no me vas a hacer caso. Pero sé prudente, está todo convulsionado y quizás alejarte un tiempo de ellas no te haga mal tampoco.

-La gente que me sigue no tiene la culpa de mis errores, no voy a desaparecer así como así. -Era lo primero que Bautista pudo responderle con firmeza-. Sé que los decepcione más de una vez en el último tiempo, pero no voy a esfumarme del único lugar en el que puedo tener contacto con todos.

-Como quieras, yo te lo advertí. A las 11 te pasa a buscar un auto para llevarte al aeropuerto. Cualquier cosa que necesites me avisas, no importa lo que sea Bauti. Te prometo que va a estar todo bien -Paula se giró para irse, pero la voz de Bautista la detuvo.

-Paula... Gracias.

Con una última sonrisa su representante salió por la puerta y un silencio inundó el departamento.

-Bueeeeeeno.... ¿Cuánto apostamos que no dura ni una semana sin salir en un portal? -Juan Cruz no terminó de hacer la pregunta que recibió un almohadonazo en la cara por parte de Bautista.

-Voy a estar casi a mil quinientos kilómetros de Buenos Aires, sin conocer a nadie y al parecer no es un lugar en donde pase absolutamente nada. Es literalmente imposible que arruine las cosas ahí también -Respondió con seguridad Bautista.

¿Qué podría salir mal?

Baunisse. Para hacer bien el amor hay que venir al sur.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora