capítulo 23

231 27 39
                                    

Que solo de guitarra orgásmico
Susurro George en mi oreja- porno puro

Me mordí el labio sonriendo
Tenía razón

-entonces unas tortitas con miel, café con leche, capuchino con una tostada de jamón queso palta
Y te con... ¿Un sanguche de triple carne y queso?

-si señorita- asintió Gus-
cuando la mujer se fue clave los ojos en el "escenario" más bien el rinconcito donde le daban lugar a los músicos para tocar.
No había más que parlantes un micrófono vacío y la batería, no repare más en ello aunque mi mente quedó inquieta
quiera ver al guitarrista.
Creo que los músicos tenían algo así como, un poder de seducción.

-yo dije que iba a quedar raro pedir esa hamburguesa...

-mh- alce los hombros-  yo tenía ganas de esto

- a el le gusta la grAasA- grito geo, y fue ignorado.

Aveces decía tantos comentarios sin sentido que los dejábamos debajo de la mesa, es decir lo dejábamos pasar.
Estábamos acostumbrados.

Si Gus no hablaba mucho, Geo hablaba por el, hablaba más de lo que era necesario, rellenaba hasta los huequitos de silencios, todo.
En este grupo equilibramos bien las cosas.

La guitarra seguía sonando estruendosa mientras la gente hablaba y comia, el sonido era como una montaña russa de notas que te daban ganas de sacudir la cabeza y darle besos a la gente.
Bueno, no quero hablar por todos, pero eso me provocaba a mí.

-estan probando los instrumentos-dijo Geo interponiendo su cara en la mía tapandome el escenario-- seguro el guitarrista es un molesto y toca antes de tiempo para joder al grupo.

-mh.. puede ser- le di la razon- pero si estuviera en una banda a mí no me molestaría para nada que toque así todo el tiempo.

-Geo tiene razón los guitarristas siempre son los insoportables de la banda, y la gente los ama porque son los más atractivos también

-a mi me calientan las pianistas, los de la guitarra puaj. Hablo Geo

Gustav rio y  lo señaló con el tenedor- eso decis porque tocas el bajo y no la guitarra.
El otro abrió la boca ofendido para responder pero por suerte, lo interrumpieron

-chicos- llamo  la atención la mesera con bandeja en mano-
les dejo Las toritas, el café con leche, el sánguche de jamón y queso con capuchino, y....el té con sánguche de hamburguesa triple.
¡Que lo disfruten! -Sonrió

-gracias contestamos al unisono- amaba este lugar, incluso los atuendos de las empleadas eran geniales, colores pasteles... El de ella era amarillo con un lazo rosa. Hermoso.
Unos redobles de batería empezaron a sonar
Cuando el sabor de la mayonesa se mezclo en
con el del pan calentito y crocante.
No pude evitar soltar un gemido de satisfacción al sentir la explosión de sabores dentro de mí boca, cerré los ojos y disfrute también de las notas sueltas de guitarra electrica que se empezaban a colar por mis oídos, dios.... El paraíso.

Estaba en una fiesta con todos mis sentidos alocados hasta que todo se detuvo
-hola nosotros somos devilish-
hablo una voz aterciopelada y grave.

-¿Ese no es tu hermano?- pregunto Geo y me bajo de sopetón a la realidad.

Mierda.

Asentí sin siquiera mirar, tenía una voz inconfundible, no había duda, el guitarrista por el que venía babeando desde que entré a este lugar, era mí hermano.
Un gesto de disgusto me pulso en el labio.
¿No podía ser un chico de mí edad?
¿Y Por que Tom tenía que estar en todos lados?

sólo disfruta Donde viven las historias. Descúbrelo ahora