𝐃𝐈𝐍𝐀𝐒𝐓𝐘
; Nadie podía salvarla de la oscuridad y el caos en el cual había caído tras su matrimonio con Viserys Targaryen.
Pero haría lo posible para salvar a los que ama y sobretodo su deber de mantener de pie el linaje Targaryen.
LUEGO DEL ESCÁNDALO producido por la princesa heredera el rey decidió viajar rumbo a Drifmark en busca de una alianza con la casa Velaryon. Los recién nombrados no desperdiciaron la oportunidad y aceptaron con ciertas condiciones.
Los siete reinos fueron avisados sobre los siete días de festejo celebrados en honor a los próximos esposos. Las reinas fueron encargadas de organizar desde la decoración hasta la comida, aunque la Hightower prefirió solo opiniones de ciertas cosas, la joven se encontraba triste y enojada.
Otto Hightower días antes fue despojado de su título como mano para que Lyonel Strong tomara aquel lugar en la corte, los sirvientes murmuraban sobre cómo cierta reina norteña había endulzado el oído del rey.
Como de costumbre seis días fueron celebrados con torneos, banquetes y bailes. La reina Lyra anunció en el quinto día su nueva espera de un bebé, cosa que dio mayor alegría ante los lores. El séptimo día llegó con rapidez y con ello la unión de ambas casas se daría por completa ante todos incluidos los dioses.
— Quiero todo listo, no quiero ningún error — la norteña caminaba con el mentón y espalda recta por las cocinas. — nuestra princesa y próxima reina se casará.
Sin más camino con elegancia en dirección a la sala del trono para ver algunos detalles pero a mitad de camino fue agarrada bruscamente del brazo y llevada a un pasillo solitario.
— ¡¿ Que crees qué haces ?! — exclamó con asombro. — acaso quieres verte comprometido con otro escándalo.
La risa del hombre se esparció por el silencio pasillo.
— Soy el príncipe canalla, he enfrentando cosas peores — el ego que desbordaba el Targaryen era impresionante. — qué tal está mi sobrino.
