Capitulo 30

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Días después.

Yle estaba por llegar, era las nueve y treinta de la noche. Hubieron unos inconvenientes y los únicos vuelos cerca eran hoy en la noche y aquí estaba esperando que ella saliera.

Había venido yo solo, no necesitaba nadien más para venir por ella y así la llevaba a cenar algo, de seguro viene muy cansada.

–Dale a que horas aterrizan–Digo desesperado viendo la hora.

Estaba realmente desesperado por verla, tenía ya más de un mes sin vernos y hablar solo por chat.

Si me viera Ian en este estado estuviera, disimula amigo que te mueres por ella.

15 minutos después.

Porfin veía como venía Yle, sonrió y levantó mi mano al verla que me busca y ya viene a mi.

–Fede–Escuchó su voz gritando mi nombre.

–Yle–Digo corriendo para alcanzarla.

La abrazo y después beso su mejilla, la extrañe tanto.

–Espera tu cabello ha crecido–Digo tocando su cabello.

–Lo has notado–Dice sorprendida.

–Si, es inevitable no notar cambio en tu linda cabellera–Digo para después revolver su cabello.

–Gracias por lo de linda cabellera–Dice Sonriendo–Si aunque es difícil que se note ya ves que el cabello se encoje por ser un poco chino.

–Pero luce muy bello, y huele delicioso, acaso a durazno–Pregunto pasando mi brazo sobre sus hombros y con la otra tomando su maleta para comenzar a caminar.

–Nuevo shampoo, me ha servido bastante.

–Se nota, andando qué te llevaré a cenar algo rico.

Salemos del aeropuerto y vamos a mi auto, subo su maleta para después subir yo.

Conduzco hasta un restaurante y vamos por algo de tacos, ya adentro esperando nuestra comida conversamos un poco.

–Oyes que onda con lo del payaso de la deep web, que miedo la verdad–Dice Yle y yo asiento.

–Bastante, me re cague te lo juro.

–Y Are vómito verdad, ¿que tal se sintió después de eso?.

–Pues un poco mareado, pero después de que se fue el payaso ya se sintió mejor.

–Que huevos para comprar un payaso he, yo les tengo un miedo desde pequeña–Dice Yle recibiendo su comida–Gracias.

–No creas que no me dio miedo, pero fue buen contenido, gracias.

–La verdad si hubiera estado en ese momento te juro que salgo corriendo y no me ven jamás–Dice haciéndome sonreír.

–Entonces si le tenes mucho miedo.

–Bastante y como no, cuando iba en la primaria andaban señores robando niños vestidos de payasos y me daba miedo por queme regresaba a casa sola en bicicleta.

–Oh valla, ¿y estaba muy leos de tu casa?.

–No tanto, pero enenos de un minuto puede pasar muchas cosas.

–Te es mucha razón.

Comenzamos a cenar y a conversar todo lo que hemos echo en este largo mes que no nos vimos, me contó que cada ves se pone más difícil la universidad.

Le conté todo lo que tengo pensado grabar y ella está dispuesta a ayudar a grabar, pero estaba bastante ansioso por darle la cámara y ver su reacción, muero por ver su cara de felicidad.

Late Night Talking || Fede Vigevani Donde viven las historias. Descúbrelo ahora