Amé mucho tu idea de mí.
La adiestré, fue mi mascota.
El mensaje y la dictadura que me diste fueron los obsequios más tristes que pude recibir.
Amé tu idea de mí.
Veneré que la sometieras.
La eduqué; le encadené una pierna al reloj de arena que nunca volteaste.
Fuiste mental, nunca supiste llegar al sur.
Dolió que no supieras bajar,
No fuiste capaz de aprender por ti mismo.
Fuiste mental,
Nunca seguiste mi ritmo cardíaco,
No supiste el color de mi sangre,
No me escuchaste hablar sola,
No me tuviste entre tus brazos,
No te mezclaste con mis labios,
No respiraste mi aliento,
No fui tu momento en el tiempo,
No tuviste nada que perder del recuerdo,
No me lloraste nunca,
No me lloraste.
Fuiste mental, me volví tu velo.
Tercera persona del singular, te seguí fiel como un perro.
Envolví tu persona, cubrí tu frente al mando.
En zona de guerra fui tu tierra de nadie.
No me lloraste nunca,
Tú no me lloraste.
Te subestimé, pensé que eras mucho más inteligente que yo.
Te subestimé mucho.
No supiste bajar una simple escalera dentro de mí.
...
Poema viejo, Anecdotario. 5 de septiembre de 2023.
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Sentencias
PoesíaPoemario (y compilatorio) gótico. NO APTO PARA MENORES. En ésta obra se utilizan términos y metáforas del gore, sangre, muerte, abuso, entre otros. Leer bajo su propio riesgo.
