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La primera academia de la capital imperial realmente es impresionante, con columnas de piedra doradas que se alzan en los pasillos de la escuela, adornadas a ambos lados con flores y plantas que brillan como estrellas. A la izquierda, en el estadio, un grupo de pequeñas hembras está realizando entrenamiento físico: levantamiento de pesas, escalada, y arrastre... El campo es muy grande y hay muchas actividades que se pueden realizar, pero al llegar a una distancia mayor, no se ve con claridad.

Debido a que se prohíbe la entrada de vehículos voladores en el campus, cuatro machos bajaron de su aeronave y caminaron hacia el interior. La escuela es tan grande que después de caminar durante más de diez minutos, finalmente llegaron al edificio de clases. Tan pronto como Chu Anyan entró, fue chocado de lleno por una pequeña hembra que corría hacia él.

Rápido de reflejos, Chu Anyan logró agarrar a la pequeña hembra que se estaba cayendo hacia atrás, evitando que tocara el suelo. Luego, con el rabillo del ojo, vio que un macho se acercaba con una actitud amenazante. Chu Anyan pudo sentir claramente cómo la pequeña hembra se encogió un poco, pero lamentablemente, ya no había espacio para retroceder.

"¡Mozhe, ¿te atreves a esconderte?! ¡Hoy verás si no te golpeo hasta morir!"

El macho se acercó y extendió la mano para agarrar a Mozhe, pero Chu Anyan lo detuvo de inmediato. Colocó a la pequeña hembra detrás de sí y miró al macho, que llevaba unas gafas de oro en la nariz. Su atuendo debería ser elegante, pero su aura agresiva lo arruinaba.

"¿No puedes hablar civilizadamente? ¿Por qué tienes que hacerle la vida difícil a un niño?" Chu Anyan apartó la mano del macho que se extendía hacia él, con un tono frío en su voz.

"¿Y tú quién te crees para hablarme así...?"

"Ou Yi, creo que no tienes intenciones de seguir trabajando aquí." Desde atrás, Weiro gritó de repente, empujando al arrogante macho y señalándole con el dedo: "El honorable Chu Anyan no es alguien a quien tú, un macho de tu nivel, le faltes al respeto. Si no puedes trabajar, entonces vete."

El macho se quedó atónito por un momento; su enojo se convirtió en temor en cuestión de segundos, lo que dejó a Chu Anyan asombrado.

"Señor Weiro, no es eso. Déjame explicarte." El macho que antes se creía invencible ahora suplicaba humildemente el perdón de Weiro, pero fue llevado por los guardias hembras que acompañaban a Weiro.

En el mundo insecto, no solo se dividen por género, sino también por riqueza y apariencia. Aunque los machos plebeyos pueden recibir ciertos privilegios, sin la acumulación de dinero y solo con su nivel, no pueden cruzar las barreras de clase; después de todo, los machos nacidos de combinaciones entre hembras y machos plebeyos no pueden alcanzar un nivel demasiado alto.

Esta es también la razón por la cual machos de alto estatus como Jin Sang y Wan Rao no tienen derecho a elegir a sus propias hembras; sus parejas deben ser poderosas, lo cual no solo se refiere a su nivel.

La pequeña hembra seguía a Chu Anyan con cautela, observando cómo llevaban al macho que la había golpeado. A su corta edad aún no sabía ocultar sus emociones; el pálido rostro que mostraba miedo ahora lucía una sonrisa.

Al llegar a la oficina, Chu Anyan se agachó para mirar a la pequeña hembra a los ojos. No parecía tener más de siete u ocho años; tenía marcas en el cuello que indicaban que podría convertirse en una guerrera cuando creciera. Chu Anyan notó con sorpresa lo suave y limpio que era; realmente no había necesidad de distinguir entre machos y hembras en esos pequeños seres adorables.

"Pequeño, ¿por qué te golpeó?" Chu Anyan acarició la cabeza de Mozhe con suavidad, temiendo asustarlo.

Mozhe aún no había procesado lo que sucedía y se dio cuenta de que estaba en la misma oficina que cuatro altos dignatarios. Aunque el que tenía delante parecía muy amable, eso no disminuía su miedo hacia los machos adultos. Su rostro seguía pálido y sus grandes ojos estaban llenos de lágrimas.

El gran príncipe de los insectos me obligo a casarme  con él  (ZERG)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora