Se fue a buscar a Jimin que estaba en su cuarto. Estaba sentado en su cama con la mirada pérdida.
— ¿Qué te pasa Jimin?, por qué tengo la sensación que algo te está molestando. ¿Es por lo de irme a vivir con Jin?
—No Kookie, ya te dije si es lo que sientes está bien. Es sólo que envidio tu determinación. A veces quisiera ser cómo tú, no pensar tanto y actuar. Pero me da miedo equivocarme.
—Jiminie, conoces a Tae hace un par de años. Cada vez que hablábamos me decías lo mucho que te gustaba tu chef. Las cosas que te atraían de él y lo inalcanzable que te parecía. Ahora lo tienes. Él te confesó que te ama y que quiere estar contigo. ¿Por qué lo piensas tanto? Yo debería estar cuestionándome si debo irme con Seokjin o no, lo conozco apenas hace unos meses, pero creo que cuando la persona correcta llega a tu vida no hay que pensar demasiado.
—Si lo hubieras visto..., creo que se sintió tan decepcionado cuando le dije que no me iría con él. Tienes razón, soy un cobarde. He tenido malas experiencias anteriores y sé que Tae es el amor de mi vida, pero a veces temo no ser suficiente para él.
—Jimin, deberías pensar en tu presente y tu futuro. Eres un chico talentoso, guapo, que tendrá un trabajo grandioso. Taehyung está orgulloso de ti y se enamoró de ti tal y como eres. Ustedes se complementan perfectamente. Ya no pienses más tonterías. Vamos al trabajo. Hablas con tu lindo rubio y le dices que ya te arrepentiste. Él va a estar feliz.
—Lo pensaré Kookie. Eres tan impulsivo..., las cosas no son tan fáciles a veces. Tú mismo te lanzaste bajo la lluvia, porque pensante que no eras la persona indicada para Seokjin.
—Es verdad y fue un error. Mi Jinnie me ama tal cual soy. No lo sé, somos un par de impulsivos, que necesitan estar tocándose y besándose. Pero nos gusta así. Y espero que nunca cambiemos.
Jimin se rió. A pesar de ser tan diferentes, su amistad había soportado una distancia de kilómetros y de años. Nadie lo conocía mejor. Tal vez por esta vez debería arriesgarse.
Cuando llegaron al Restaurante, ya había muchos de sus compañeros, esperando por lo que su jefe tendría que decirles. A pesar que muchos circulaban por la cocina, Jungkook no se resistió y se escabulló a la oficina del Chef. Necesitaba desesperadamente su dosis de besos y abrazos.
Al verlo entrar, Seokjin le puso seguro a la puerta y lo arrinconó en una de las paredes más alejadas de la entrada, besándolo con furia y pegando su cuerpo al de él. Jungkook suspiró. Eso era exactamente lo que estaba deseando y extrañando. Sentía como la lengua de Jin se movía por su boca y él trataba de hacer lo mismo. Ese hombre lo amaba y lo deseaba y pensar en eso a Kook lo volvía loco. Poco a poco se fueron calmando haciendo del beso algo suave y disfrutando el estar juntos otra vez.
— ¿Qué haré cuando estés estudiando o decidas salir por ahí?, necesito de ti Jungkookie. Estaba preocupado que Jimin te hiciera cambiar de opinión de venir a vivir conmigo. El pobre Taehyung está muy triste. Yo lo entiendo, también me hubiese puesto triste si tú no hubieras aceptado.
—Tonto Chef, yo te amo y no tengo dudas. Sé que para ambos es una apuesta, pero te prometo que haré todo de mi parte para que resulte.
—Mi hermoso bebé, sé que lo harás. Yo también pondré todo de mi parte —Seokjin le dio un último beso, antes de decidir, al fin salir y hablar con su personal.
Jungkook se fue al lado de Jimin, quien lo miró y movió la cabeza, al notar sus labios húmedos e hinchados. No entendía cómo esos dos no se podían controlar. Por otra parte Tae sólo lo miraba con ojos tristes. Apenas se habían saludado al llegar. Pero ahora revelarían también su relación y eso lo ponía todavía más nervioso.
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Enamorándome de Ti
Fiksi PenggemarKim Seokjin, 28 años, es considerado el mejor Chef de Corea. Amado por sus comensales y la crítica especializada. Seokjin además es un personaje muy mediático, le gusta asistir a programas de televisión y hace unos años se declaró abiertamente gay. ...