Capítulo 11

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𝙋𝙚𝙧𝙤 𝙦𝙪𝙚 𝙜𝙧𝙖𝙣 𝙘𝙤𝙣𝙛𝙚𝙨𝙞ó𝙣.

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Después del fuerte entrenamiento, Dai y Shiro salian de la Academia con pasos tranquilos, mientras el atardecer se hacía presente frente a ellos. Durante el transcurso escucharon una conversació un tanto peculiar...

-Mi particularidad es algo que recibí de alguien más -Dai jaló a shiro detras de un arbusto para escuchar mejor la conversación de Midoriya el chico explosivo-

Shiro se quedó ligeramente sorprendido cuando Dai lo jaló hacia el arbusto, pero siguió adelante y juntos se agazaparon, escuchando la conversación entre Midoriya y el otro chico.

-¡Aunque no puedo decir de quién! No lo diré...Pero es como una historia de un libro de cómics, excepto que es verdad. Aparte de eso...aún no puedo controlarla. Apenas recibí este poder, no puedo hacer nada...

Shiro se inclinó hacia adelante, tratando de captar cada palabra de la conversación. La mención de una historia de un libro de cómics que era cierta y el hecho de que Midoriya aún no podía controlarla despertó su interés. Él miró hacia Dai, notando su expresión pensativa.

-Es por eso qué...intenté derrotarte sin usarlo. Aún tengo un gran camino por recorrer...por eso haré esta particularidad mía y te derrotaré con ella!. -

Dai se tensó mientras escuchaba las palabras de Midoriya. Ella se sentía identificada con su lucha por dominar su poder y hacer que éste fuera suyo. Su expresión se volvió más pensativa, con una mezcla de empatía y comprensión en sus ojos. Shiro también percibió el silencio que se apoderó del entorno y observó a Dai, notando cómo las palabras de Midoriya habían tocado una fibra en su corazón.

-¿Qué es eso? -el peliceniza cortó el silencio- ¿"poder recibido"? hablas tonterías ¿Intentas hacerme quedar aún más idiota? ¿¡Qué intentas decir!?

El repentino ataque verbal del peliceniza sobresaltó a Dai y Shiro, que estaban escondidos detrás del arbusto. Ellos intercambiaron miradas de sorpresa y tensión, mientras continuaban escuchando la conversación que se desarrollaba delante de ellos.

-Hoy perdí contra ti -continúo- eso es todo... -la frustración se hizo presente en su voz- ¡Y cuándo vi al tipo de Hielo y a la maldita pelirroja pensé "no puedo derrotarlos"! -lagrimas caían por sus ojos- ¡Maldición! Terminé aceptando lo que la chica de cola de caballo dijo -puso sus manos tapando su cara cubriendo las lagrimas-

Dai y Shiro observaban con una mezcla de sorpresa y lástima la frustración y vulnerabilidad que mostraba el peliceniza. Sus palabras dejaban en evidencia los sentimientos de inferioridad y el deseo de superarse que albergaba, y el hecho de que se abriera y se mostrara tan vulnerable delante de los demás era algo inusual y poco común en él.

-¡Maldición! ¡Maldición! ¡Maldición! ¡Oye tú también Deku! -dijo- Yo solo...¡acabo de empezar! ¿Escuchaste? Aquí me convertiré en el Héroe Número 1 -se da la vuelta- Salgan de ese máldito arbusto idiotas

Dai y Shiro se estremecieron cuando el peliceniza de pronto se dio cuenta de su posición y les gritó que salieran del arbusto. Rápidamente, salieron del arbusto y se pararon frente a él con cautela, aún procesando lo que habían escuchado.

- Dai-chan!? -El peliverde se exaltó por la presencia de los inseparables amigos- E-escucharon todo?

-Si Midoriya -dijo dai- tranquilo, tu secreto está seguro con nosotros

Shiro asintió en acuerdo con las palabras de Dai. Él pudo ver la preocupación y la tensión en el rostro de Midoriya, sabiendo que él estaba preocupado de que pudieran divulgar su secreto. Shiro se mantuvo en silencio, dejando que Dai tomara la palabra.

¿𝙈𝙞 𝙥𝙧𝙤𝙥𝙤𝙨𝙞𝙩𝙤? (bnha x oc) [en pausa temporal]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora