✺*⊹Dulce de Uva⊹*✺

𝟝 •°•┆𝕮𝖔𝖈𝖎𝖓𝖆┆•°• 𝟝

𝙎𝙤𝙡𝙤 𝙝𝙚 𝙫𝙞𝙨𝙩𝙤 𝙡𝙖 𝙨𝙚𝙧𝙞𝙚 𝙙𝙚 𝙏𝙈𝙉𝙏 2012, 𝙚𝙣𝙩𝙤𝙣𝙘𝙚𝙨 𝙡𝙖𝙨 𝙥𝙚𝙧𝙨𝙤𝙣𝙖𝙡𝙞𝙙𝙖𝙙𝙚𝙨 𝙙𝙚 𝙡𝙤𝙨 𝙧𝙤𝙩𝙩𝙢𝙣𝙩 𝙨𝙚𝙧á𝙣 𝙖𝙡𝙜𝙤 𝙙𝙞𝙛𝙚𝙧𝙚𝙣𝙩𝙚𝙨. 𝙋𝙞𝙙𝙤 𝙙𝙞𝙨𝙘𝙪𝙡𝙥𝙖𝙨 𝙮 𝙖𝙘𝙚𝙥𝙩𝙤 𝙖𝙮𝙪𝙙𝙖 𝙚𝙣 𝙡𝙤𝙨 𝙘𝙤𝙢𝙚𝙣𝙩𝙖𝙧𝙞𝙤𝙨.

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TMNT 2012, Nueva York

Donatello despertó con pesadez, sintiéndose desorientado. Abrió sus párpados con pereza, observando a su alrededor, tratando de acostumbrarse a la oscuridad que era habitual en su habitación.

Suelta un gruñido cuando decide levantarse, aún queriendo estar en cama, pero no podía, tenía que ir al entrenamiento matutino.

Bosteza a la vez que se estira. Toma su bandana, la cual estaba en su mesita de noche.
La coloca en su lugar y mientras hace esto trata de escuchar que sucedía en la guarida.

Agudizó su oído, escuchando con algo de claridad el sonido de la televisión. Seguramente Mikey o Rapha.

Vuelve a gruñir de forma baja, tenía la esperanza de ser el primero despierto. Se puso el cinturón porta-bō, sus rodilleras, vendas, etc. Su mirada no estaba en un punto en específico.

No tenía muchas ganas de salir y verlos. Estaba dolido y enfadado con los mayores, mientras que sentía profunda tristeza ver a su único hermano menor confiar en él ciegamente, lo agradecía, sí, pero para su persona, no merecía ese amor.

Cruza la habitación, yendo a la puerta. Sus pensamientos le provocaban jaqueca, muchas emociones fuertes, y eso que apenas era de mañana.
Poso su mano en la perilla y la gira despacio, intentando hacer el menor ruido posible, no quería denotar que estaba despierto.

Empujó con suavidad, haciendo que la puerta rechinara, provocándole un enojo y frustración.

‹‹Ugh... estúpida puerta››

Con ese pensamiento en mente y el seño fruncido, asoma su cabeza para checar si alguien estaba por los alrededores.
Al confirmar que nadie estaba por ahí, se escabullo hacia su laboratorio, haciendo uso de sus habilidades ninjas.

Sus ganas para ir al entrenamiento eran escasas, prefería quedarse en su laboratorio haciendo cualquier cosa...

O...

Podía ir se visita con su homólogo...

Su cara reflejo algo de sorpresa y desconcierto por su propia idea, aunque rápidamente cambio esa expresión a una sonrisa tímida, tenía ganas de hablar con Don.

Miró a los lados, temiendo que alguien estuviera observandole desde las sombras, leyendo todo lo que pensaba.

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De algún modo, el ninja de morado había logrado evadir al líder y salir de la alcantarilla.

Era de día, entonces tendría prudencia, se camuflaba entre las sombras, invisible ante los ojos humanos.

Saltando de techo en techo se dirigía a la "casa" de su contraparte. Ahora que lo pensaba, no tenía idea como había obtenido el lugar.

Tal vez un asalto o asesinato... no, era ridículo. Don se veía capaz, pero no lo habría echo, o eso esperaba.