𝘅𝗶𝗶. con el pasivo encima

105 16 2
                                    

Con el pasivo encima.

──────────────

"Nein, nein!, ¡de ninguna manera!" (¡No, no!) Berlín intentó cerrarle la puerta en la cara, su esfuerzo se vio interrumpido cuando URSS logró interponer su brazo.

Su expresión se contrajo en una mueca de dolor cuando la puerta aplasto su brazo, "Берлин, por favor necesito que me escuches." (Berlín) insistió empujando con su labro libre la puerta.

La capital gruño con molestia dejando de empujar y permitiéndole al menor liberarse, paso una mano por su cabello en un intento de calmarse.

"No me harás cambiar de opinión." recalcó, uno de sus dedos apuntando acusatoriamente al soviético.

URSS sobo su brazo afectado suavemente, evitando la molesta mirada del mayor, "Necesito su ayuda..."

Quizá esperaba mucho del alemán pero habían estado dispuestos a echarle una mano con su intento de revolución-en la cual preferiría no pensar ahora-así que no deberían tener problemas en darle un poco de ayuda una segunda vez, ¿verdad?

Su esperanza se esfumó cuando el mayor volvió a fusilarlo con la mirada.

"¿Tienes una mínima idea del problema en el que estamos metidos?" URSS se encogió en su lugar ante el tono de sus palabras, le recordaba un poco a su padre. Lo detestaba.

Si Berlín no notó su reacción o simplemente prefirió ignorarla era un misterio para el menor, "¿Que crees que haría el zarista si se entera que estamos escondiendo a su bastardo detrás de su espalda?" el enojo era evidente en la manera que vocalizo cada palabra, "¿Que crees que le haría a Deutschland?" (Alemania)

El menor guardó silencio, mordiendo el interior de su mejilla nerviosamente, tenía que admitir que la ciudad tenía razón, aun así "Solo necesito un lugar donde quedarme, será temporal. Lo prometo."

El berlinés agradeció internamente sus años de experiencia y la paciencia que estos le habían dado, si no los tuviera probablemente ya estaría golpeando su cabeza-o la de URSS-contra la pared más cercana. Tomo aire, inhalando paciencia infinita para poder razonar con el joven ruso.

"No permitiré que pongas en peligro a el imperio una segunda vez, esa es mi respuesta final."

Los hombros rectos del eslavo se desplomaron ante el rechazo, habría vuelto a discutir de no se por la interrupción del menor de la familia. Reich se asomo por la puerta recientemente abierta, ni siquiera habiéndose molestado en tocar para asegurarse de no estar interrumpiendo nada importante.

"Sowjet!, ¿Qué haces aquí?" el niño se acercó a paso rápido hasta su amigo, una gran sonrisa plasmada en su rostro. El gesto hizo que Berlín suspirara, haciéndose una idea sobre cómo terminaría todo esto.

URSS hizo el intento de responder al menor pero fue interrumpido abruptamente por esto, "¿Vienes desde el territorio de tu padre, cierto? ¡allí está Vater!" (Papá) la sonrisa en su rostro no vaciló ni una vez y la velocidad de sus palabras era ridículamente rápida para un niño de 12 años "¿Como está él? ¿lo has visto?"

El soviético miró rápidamente a la capital antes de devolver su atencion al menor, "¡Él esta bien!" mentía, no se había cruzado con Imperio Alemán desde que lo había visto hace ya unos meses cuando el mayor le entregó una escopeta y le deseo buena suerte con su revolución pero Reich no tenía porque saber eso, "Hey Богатый, ¿Qué te parecería si me quedase a vivir con ustedes por un par de días?" (Reich) intentó probar suerte con el menor de la familia, no tenía nada que perder de todas formas.

el precio del poder ─── countryhumans.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora